La carta a hosteleros vascos de Gure Esku Dago pidiendo dinero devuelve la extorsión de ETA al debate político

La cadena humana por el derecho a decidir que el domingo pasado unió las tres capitales vascas trae cola. La publicación de una carta en la que los convocantes Gure Esku Dago pedían a hosteleros la aportación voluntaria a la entidad del 10% de las ganancias de ese día ha generado un desencuentro político entre PNV y PP tras denunciar los 'populares' los recuerdos a la extorsión de ETA que evoca la misiva.

Fue el portavoz parlamentario del PP, Borja Sémper quien hizo la comparativa que ha indignado al PNV, que apoyó el acto. El diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano (PNV) ha tachado sus palabras de "una denuncia absolutamente injusta", y ha recriminado que se utilice, de nuevo, "la idea que todo es ETA", ha dicho en una entrevista concedida a Onda Vasca. "Es la extensión de la mancha de la sospecha que en su momento le funcionó y muy bien al PP", ha añadido.

Semper, que compartió la carta en Twitter, dijo ayer, aún reconociendo las diferencias entre las peticiones, que la carta de la plataforma independentista "evoca los años más oscuros y asquerosos de la extorsión que han sufrido hosteleros de la comunidad autónoma" para "no ser señalados como quienes no colaboraban" con los abertzale. 

Según Semper, le consta que ha habido hosteleros en la ciudad que se "han sentido extorsionados y violentados" y que han aceptado pagar ese 10% "por miedo a ser señalados".

La carta alude a la intención de generar ambiente festivo en el Casco Viejo de la ciudad y para ello Gure Esku Dago se ofreció a decorar las calles y los bares, y a organizar distintas actividades.

Es el añadido en el que se "da la oportunidad" a los dueños de bares y restaurantes de apoyar la dinámica de la plataforma con la aportación a esta organización del 10% de las ganancias de ese día el que ha provocado el conflicto.  La presión que se denuncia estaría en la visita anunciada en el texto para conocer la respuesta de los contactados.

Gure Esku Dago ha publicado este jueves un comunicado en el que matiza que nunca pidió dinero, que era una opción de carácter voluntario y pide disculpas a quienes hayan podido sentirse presionados. "De todas formas, tomaremos medidas para que estos malentendidos no se vuelvan a repetir".