Política

Podemos admite no haber medido el apoyo a Syriza en clave electoral

    Mayoral, en una comparecencia de Podemos. <i>Imagen: EFE</i>

    Carmen Estirado

    Podemos volvió a cerrar filas con Syriza. Si hace cinco meses su secretario general Pablo Iglesias salía a celebrar la victoria de Alexis Tsipras en Atenas, ayer la formación dejó claro que sigue defendiendo las políticas del que llegó a bautizar como su partido hermano aunque reconoció que lo hacía sin medir las consecuencias electorales en España. "Nos alineamos con el Gobierno de Grecia", apuntó el secretario de Movimientos Sociales de Podemos, Rafael Mayoral, quien defendió la postura de Tsipras de pedir el "no" en el referéndum del próximo domingo.

    A juicio de Podemos, "el Gobierno griego ha reaccionado de manera ejemplar, dándole la palabra a la ciudadanía para que decida democrática y soberanamente su propio futuro". Es más, en un comunicado Iglesias critica que el Ejecutivo español no hiciera lo mismo en el año 2011 y 2012, cuando comenzaron los recortes tras las desviaciones del déficit.

    El texto no habla de las consecuencias que podrían derivarse del referéndum ni de posibles soluciones ante la acuciante falta de liquidez griega. Es más, Mayoral ni siquiera quiso pronunciarse sobre el hecho de que en Grecia, un ciudadano no pueda sacar más de 60 euros diario en un cajero.

    No obstante, lo que sí que tienen claro desde el partido es que la responsabilidad de haber llegado a esta situación es de "los aliados del PP y del PSOE". Esto es, tanto Nueva Democracia como el Pasok, "quienes falsearon las cuentas, entregaron la soberanía del país a la troika y legaron al Gobierno de Syriza una catástrofe económica y social que es necesario y urgente revertir".

    Pero Iglesias no sólo culpa al PP de haber originado la agonía griega. El partido además critica que esté entorpeciendo una solución. "Lo que más nos preocupa es la imagen lamentable que está dando Rajoy internacionalmente", decía Mayoral, quien acusó al presidente de relegar a España a "colonia de Merkel". Así, exige al Gobierno y a las instituciones europeas que garanticen que el referéndum se celebre en "condiciones de libertad y normalidad".

    La unión de Podemos con Syriza siempre ha sido una arma de doble filo para el partido español. Ambas formaciones defienden el mantenimiento de las pensiones, así como la reestructuración y quitas de la deuda.

    Para Iglesias, esta antesala representa un termómetro por si parte de su programa podría o no llegar a buen puerto. En el caso de que finalmente los órdagos de Syriza ahoguen a Grecia, en España muchos militantes de Podemos podrían bajarse del barco.

    "No es momento de medir las consecuencias electorales", decían desde el partido. Aun así, parece que ya lo han hecho, pues, tras meses de intentar desvincularse de Syriza, ayer dejaron claro que ese era su bando. "Hoy en Europa hay dos campos enfrentados: la austeridad o la democracia, el gobierno del pueblo o el gobierno de los mercados".