Pablo Iglesias: "Me da bastante pena el papel del jefe del Estado, es muy aburrido"

El secretario general de Podemos y eurodiputado de la formación, Pablo Iglesias, ha asegurado 24 horas después de saludar al rey Felipe VI y entregarle un pack de la serie Juego de tronos que el papel del jefe del Estado le parece "aburrido".

Valorando su encuentro de este miércoles con el monarca en una entrevista en Radiocable, Iglesias ha revelado que, hablando off the record con otros eurodiputados, comentó: "Me da bastante pena el papel del Jefe del Estado". A lo que ha añadido este jueves: "No le envidio nada".

Con estas palabras, Iglesias ha matizado que se refería al "ambiente cortesano" que se encuentra el Rey en cada uno de estos "actos aburridos y fríos". "Hay que tener bastante buen carácter para aguantar tantas conversaciones intrascendentes y generalidades de la gente", ha dicho el líder de Podemos. En este sentido, Iglesias ha asegurado que con el regalo de Juego de Tronos pretendía tener un "gesto simpático" con el monarca.

Por otro lado, Iglesias ha lanzado una crítica velada a las formaciones que no quisieron estar en la recepción con Felipe VI, como fue el caso de IU: "Respeto a quienes han preferido darse la vuelta, esconderse y no estar aquí".

Respecto a su interacción posterior con el Rey, Iglesias ha referido que en ese tipo de encuentros sólo se habla de cuestiones superficiales y que la trascendencia de las conversaciones no pasa de preguntar el estado de la familia. Sin embargo, ha destacado que se volvió a poner sobre la mesa el tema de una audiencia privada del monarca con Podemos.

A este respeto, el secretario general de la formación morada ha afirmado que durante el corrillo posterior al saludo el monarca le emplazó a celebrar esa reunión antes del verano y, de no poder celebrarse por problemas de agenda, trasladarla a después de las elecciones catalanas del 27-S o de las generales. "Será un placer discutir de política con el Rey", ha subrayado el eurodiputado.

Cuestionado sobre sus postulados republicanos, Iglesias ha enfatizado que su prioridad son "los servicios públicos" y sólo después entraría en un debate en el que, ha defendido, habría que preguntar a la ciudadanía.