El 'arma' de Europa frente a Trump

Europa no está indefensa ante la ofensiva de aranceles "recíprocos" de Donald Trump. Es cierto que la relación comercial entre EEUU y la UE arroja un superávit favorable de esta última de unos 150.000 millones. Pero en lo concerniente a los servicios, los roles cambian y es Europa quien sufre un cuantioso déficit de unos 110.000 millones frente a la primera economía del planeta. Buena parte de esta cantidad viene derivada de la necesidad de las comunicaciones, la industria o la sanidad europeas de recurrir a los servicios que ofrecen las grandes tecnológicas estadounidenses.

Europa se erige así en un mercado crucial para las llamadas siete magníficas. Gravar a estas firmas, que además son muy cercanas al actual inquilino de la Casa Blanca, es la mejor arma de negociación de Bruselas frente a EEUU. Además, es una opción que la UE puede poner en marcha sin demasiadas complicaciones. Ello debido a la existencia de un instrumento clave: el mecanismo de anticoerción. Creado en 2021 como respuesta y fórmula de salvaguarda tras el tira y afloja del primer mandato de Trump, este instrumento permite a la Comisión responder a EEUU siempre y cuando tal decisión sea respaldada por un 55% de los países de la UE, que sumen al menos el 65% de la población. Queda así patente que Europa cuenta con un importante arsenal frente a la guerra arancelaria impulsada por el mandatario republicano. Urge por ello que Bruselas sea firme y responda a Trump con sus mismas armas, atacando la exportación de servicios digitales de EEUU a la UE con aranceles, si es necesario, y protegiendo los productos europeos frente a terceros. Así lo hizo ya en el primer mandato de Trump y Washington reculó entonces en su propósito de gravar las exportaciones.