Opinión
Normalización de la deuda catalana
- El 'Govern' prevé volver a emitir bonos en los mercados en 2025 tras más de una década financiándose a través del FLA
elEconomista.es
La Generalitat de Cataluña prevé volver a acudir a los mercados para financiarse a partir del próximo año. En concreto, la Consejería de Economía estima lanzar emisiones que cubrirán el 5% de su deuda total en 2025, del 10% en 2026, del 15% en 2027 y del 20% en 2028. Pese a que se trata de porcentajes aún bajos supone todo un hito que el Govern se plantee su regreso a los mercados.
Desde 2012, la administración autonómica se ha financiado exclusivamente a través de los diferentes mecanismos del Estado. El más conocido es el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), del que Cataluña ha recibido 102.622 millones. Dicho instrumento se impulsó para que las autonomías pudieran financiarse en plena crisis de deuda. Esto disparó las primas de riesgo de los países del sur de Europa y dejó a los bonos autonómicos sin grado de inversión.
Pero dicha situación excepcional terminó, por lo que es adecuado que las CCAA regresen a la normalidad. Ahora, por fin, el crecimiento económico del territorio y la alta recaudación da opción a Cataluña de sumarse a autonomías como Madrid y acudir en busca de inversores que compren su deuda.
A ello contribuye también que el bono catalán ha mejorado desde 2021 su calidad crediticia asignada por las agencias de rating. Se ha pasado así del bono basura a grado de inversión. La deuda catalana cumple así con todos los requisitos para volver a la normalidad y abandonar progresivamente la ayuda que el Estado le ofrece. En esta situación también sería deseable que el Govern no olvide los compromisos que contrajo con el Estado mientras necesitó su auxilio y en lugar de la condonación de la deuda acumulada, como exige el secesionismo, la devuelva a la administración central.