Lastre a la creación real de empleo
- El 53% del aumento de la afiliación en el pasado mes de abril corresponde a trabajadores fijos discontinuos
elEconomista.es
El mercado laboral español ha superado por vez primera la barrera de los 21 millones de ocupados tras sumar casi 200.000 afiliados a la Seguridad Social el pasado mes de abril. Un hito que, sin embargo, incluye varios datos que despierten serias dudas sobre la fortaleza de esta creación de empleo.
El principal es que más de la mitad del total del incremento mensual corresponde a asalariados con un contrato fijo discontinuo, sin que las estadísticas desglosen cuántos de estas afiliaciones proceden de altas de nuevos trabajadores y cuántas de aquellos que han reactivado su cotización tras un nuevo llamamiento de su empresa.
Además, siete de cada diez de esos fijos discontinuos pertenecen al sector de la hostelería, lo que alimenta las sospechas de que se está produciendo un trasvase de gran parte de la precariedad que antes provocaban los temporales a esta modalidad supuestamente más estable. Una nueva forma de dualidad del mercado de trabajo que tiene una consecuencia clara: maquillar el incremento de la ocupación. Así lo confirma un análisis de la evolución interanual del empleo. Aunque el Gobierno puede presumir de una importante subida de los indefinidos a tiempo completo respecto a 2023, cabe preguntarse cuánto más habrían aumentado si el espejismo mensual provocado por los fijos discontinuos no se desvaneciera por completo a medio plazo.
Un país con casi 2,7 millones de parados, sin contar los que tienen este tipo de contrato pero han pasado a la inactividad, no puede permitirse el lujo de ningunear la precariedad que amenaza a cada vez más indefinidos. Corregir este lastre a la creación de empleo es una obligación de cualquier política laboral responsable.