Opinión

El turismo del futuro se escribe en verde

  • La inversión dedicada a acciones e iniciativas sostenibles se ha convertido en un instrumento financiero no solo para la renovación del sector

Isabel Piñero

El sector turístico muestra una clara tendencia creciente: la importancia de la sostenibilidad en su cadena de valor. Desde hace ya unos cuantos años, hemos podido observar cómo el posicionamiento sostenible de las empresas turísticas ha evolucionado hasta ser una pieza clave y un movimiento que no se puede ni se debe ignorar.

La inversión dedicada a acciones e iniciativas sostenibles se ha convertido en un instrumento financiero no solo para la renovación del sector, sino también para asegurar su resiliencia. Es por ello que, este año, la Organización Mundial del Turismo ha marcado "Las inversiones verdes" como temática principal del Día Mundial del Turismo, destacando su importancia dentro de un sector que, en 2019, movilizó 61.800 millones de dólares en inversión extranjera directa global.

Aprovechando este lema, quiero ofrecer una reflexión sobre lo esencial que es para las empresas de nuestro sector que incorporemos la sostenibilidad en nuestras operaciones para asegurar una preservación del planeta, un cuidado de las personas y una proyección próspera en el futuro del turismo.

En el énfasis de proteger nuestro planeta, observamos un cambio de tendencia en los criterios de elección de los turistas, que cada vez valoran más que su estancia se realice en hoteles que trabajen en la implantación de la sostenibilidad y con prácticas destinadas a la conservación del medioambiente. Según McKinsey, el 70% de los turistas globales tiene la intención de viajar de manera más sostenible en el próximo año y uno de cada tres se fija en las iniciativas de sostenibilidad de los alojamientos y el transporte antes de tomar sus decisiones de reserva.

Para poder cumplir estos nuevos estándares de exigencia, las empresas debemos priorizar la implantación de la sostenibilidad de una forma activa. Desde Grupo Piñero, llevamos años trabajando en la incorporación de prácticas ambientales y sociales en nuestra compañía, y con el objetivo de continuar impulsando la integración de criterios ESG en todos los proyectos e ideas, en el año 2022 se creó la División de Sostenibilidad. Su función principal ha sido la de supervisar la asimilación de esta nueva visión verde en todos los niveles de la empresa y, gracias a la dedicación de todo nuestro equipo, hemos podido invertir 2,7 millones de euros en el último año en gestiones medioambientales, que se suma a las inversiones verdes realizadas desde 2016 por el valor de 20.301.054 €.

Estamos acostumbrados a comprender la sostenibilidad desde una perspectiva estrictamente medioambiental, cuando lo cierto es que invertir en verde implica un compromiso mucho más amplio. Según la OMT, en 2019, el sector empleaba a 1 de cada 10 personas de todo el mundo y, según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo, al cierre de 2023, el sector turístico será responsable del 14,4% del total de los puestos de trabajo en España. Es imperativo que, en las inversiones verdes realizadas desde las empresas del sector, también se incluyan políticas relacionadas con el bienestar de las personas.

Tenemos la obligación de cuidar a las personas que se dedican cada día a sacar este sector adelante, contribuyendo a su progreso y defendiendo su justicia social. Para conseguir esto, las empresas tenemos que ofrecer formaciones, gestionar nuestro talento interno y asegurar una igualdad de oportunidades e inclusión con todos nuestros colaboradores, demostrando nuestro compromiso por liderar de forma responsable a nuestros equipos para ofrecer la mejor experiencia laboral posible.

Por último, no podemos hablar de invertir en verde sin hablar sobre la prioridad estratégica que supone la innovación en nuestras operaciones. Es necesario que hagamos un uso de la tecnología para ser más eficientes medioambientalmente, pero también para mejorar la experiencia del talento en su día a día, fomentando su evolución profesional. Además, integrando un pensamiento innovador en nuestras actividades, aseguramos la mejora constante de nuestros negocios; logrando el objetivo no solo de implementar políticas sostenibles, sino de invertir en productos hoteleros que incluyan la sostenibilidad desde su ideación.

La reflexión que debemos hacer desde las empresas, reflejada de forma directa en el lema del Día Mundial del Turismo de este año es muy clara; para hacer frente a las circunstancias de nuestro sector, tenemos que promocionar y priorizar las inversiones verdes. No solo por el cuidado del medioambiente, que es una responsabilidad compartida entre todos para cuidar el planeta en el que vivimos, también debemos hacerlo para empoderar a nuestros trabajadores y para garantizar la prosperidad del sector.

Esta responsabilidad recae en las compañías. Somos nosotros los que tenemos que transformar el sector en un modelo regenerativo mediante la mejora de nuestras prácticas y nuestros servicios para asegurar una oferta sostenible. Es el momento de contar con una planificación estratégica en inversiones verdes que se traduzca en múltiples ventajas hacia la acomodación de las nuevas preferencias del viajero, la consolidación de nuestro talento interno y la creación de modelos de negocio y productos innovadores que nos ayuden a seguir fortaleciendo este gran sector. Escribir en verde ya no es una elección, se ha convertido en una inversión.