Opinión
El mayor músculo por dividendo del Ibex
elEconomista.es
El ánimo conciliador de Donald Trump con China, unido a los mensajes de la Fed y el BCE en favor de reactivar las políticas expansivas impulsan las bolsas. De hecho Wall Street alcanza máximos históricos.
No obstante, los gestores indican que sigue sin ser el momento de comprar debido al posible agotamiento del rebote y a que la próxima cumbre del G-20 puede volver a desatar las hostilidades en la guerra comercial. Ante este escenario de volatilidad, la opción de aferrarse al tradicional atractivo por dividendos que el Ibex ofrece se antoja como prometedora. Máxime si el inversor tiene en cuenta que este verano las cotizadas del mercado español pagarán casi 6.000 millones, lo que supone un incremento del 24 por ciento respecto al pasado año.