Cómo mimará Sánchez a sus socios de la moción

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es consciente de que la aprobación del techo de gasto para 2019, y los Presupuestos de ese año, es casi imposible. Pero las dificultades no le impiden poner deberes a todos sus ministros, especialmente a la de Hacienda, María Jesús Montero, para que trabajen sin descanso en julio y agosto.

¿Objetivo? Tener un esboza preparado en septiembre para tantear acuerdos. Sánchez es consciente de que dichas negociaciones serán muy duras. De ahí que, según dicen en Hacienda, esté preparando unas cuentas que nadie pueda rechazar. "Tratará de mimar a los partidos que avalaron la moción de censura", dicen.

Por lo visto, las cuentas incluirán inversiones concretas pactadas con los partidos nacionalistas (PNV, PDeCAT y ERC) para acelerar la obtención de apoyos. Cuentan que también incluirán regalos para que el resto de territorios, especialmente la Andalucía de Susana Díaz, no pueda criticar que se trata de unos Presupuestos para Cataluña y el País Vasco.

Con todo, en Moncloa lo que llevan más en secreto es la posible oferta que harían a Podemos. Hay quien dice que quieren dar un buen golpe de efecto en este ámbito, en cuanto a políticas sociales y ver si el partido morado "se atreve a dar la espalda en este sentido".