Opinión

Incompleta recuperación del empleo


    elEconomista.es

    Mes tras mes el Gobierno celebra los datos inusualmente positivos del mercado laboral, como los registrados por el paro el pasado mes de enero o los mostrados por la última EPA, con un incremento récord de la ocupación en 2021.

    Es más, ya antes del verano el Ejecutivo se congratuló de haber recuperado el nivel de afiliación propio de 2019. Ahora bien, existen otros indicadores capaces de poner en evidencia la precipitación de quienes dan por terminada la crisis en el mercado laboral español. Especialmente sorprendente es la elevada contribución del empleo público para sostener los niveles de ocupación en nuestro país. Así, desde la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa la aportación del sector público se ha incrementado cuatro veces más que en el privado. Concretamente, las empresas han generado en tres años y medio un total de 359.200 empleos, un 2,7% más que lo registrado en el segundo trimestre de 2018. Mientras, el conjunto de las Administraciones han añadido al mercado laboral a 357.700 empleados, un 11,4% más que el nivel mostrado en 2018. Estas cifras confirman hasta qué punto el crecimiento del empleo del que presume el Gobierno no es tal: se sostiene sobre un sector público sobredimensionado que maquilla la difícil situación que atraviesan las empresas y los autónomos frente a las Administraciones para crear empleo. El elevado peso del sector público también provoca que España acumule ya un descenso de la productividad del 7,6% en los últimos 14 trimestres, el mayor de todos los países europeos. Pero sobre todo deja patente la incompleta recuperación de nuestro mercado laboral y la persistencia de los daños que la crisis provocó en el empleo.