Opinión
Fallece el prestigioso economista José María Gay de Liébana
- Colaborador de 'elEconomista', fue referente de la divulgación de temas económicos
elEconomista.es
El economista, abogado y profesor universitario, José María Gay de Liébana, ha fallecido este viernes en Barcelona a los 68 años tras una larga lucha contra el cáncer. Gay de Liébana fue columnista habitual de elEconomista y su último texto apareció en la edición de hoy de este diario.
La divulgación de los más diversos temas económicos en España, y en otros países, tiene en Gay de Liébana a uno de sus máximos representantes a través de su destacada presencia en todo tipo de medios de comunicación.
Igualmente destacable es su extenso currículum académico, con una trayectoria de 42 años como profesor universitario, los más de 25 libros firmados en solitario o con varios autores o sus incontables conferencias
Además de ser Doctor en Ciencias Económicas y Doctor en Derecho, también contó con los títulos de perito, censor jurado de cuentas y auditor. Entre sus titulaciones también figuraron las licenciaturas de Ciencias Empresariales y de Administración y Dirección de Empresas, además de ser diplomado en Estudios de Dirección de Empresas, Especialidad Económico-Financiera, por Esade, y de tener un MBA y Máster Universitario en Negocios Internacionales.
Faceta docente
En su faceta docente, destaca su labor como profesor titular de Economía Financiera y Contabilidad en la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Barcelona (UB) desde hace cuatro décadas. También dio clases de Máster y Posgrado y fue profesor invitado en otras universidades nacionales e internacionales.
Fue también académico de Número de la Real Academia Europea de Doctores, y acumuló innumerables distinciones en todas sus disciplinas de acción, además de ser miembro activo en múltiples entidades, desde el Colegio de Economistas de Cataluña a Foment del Treball, pasando por la Asociación Española de Contabilidad y Administración de Empresas (AECA).
Afición por el deporte
Junto a la economía su otra gran pasión la constituía el deporte, que muchas veces vinculó con el análisis económico y viceversa. Aficionado al tenis y perico hasta la médula -fue directivo y accionista del RCD Espanyol-, ha sido asesor económico de las federaciones de tenis catalana y española; fue consultado por la UEFA para crear el Fair Play financiero en los clubes de fútbol europeos y también redactó dictámenes de clubes de la Liga.