Se habla del ninguneo de Colau a sus interventores, de la pifia del BOE y de la sede de Ciudadanos
El Tsunami
Colau ningunea a sus propios interventores
La concesión de subvenciones públicas del Ayuntamiento de Barcelona lleva siendo motivo de polémica desde hace años. De hecho, la Fiscalía ya investiga si el equipo de Ada Colau ha incurrido en algún tipo de delito durante la pasada legislatura. Tampoco han faltado las continuas críticas de la oposición, destacando que Colau riega a "entidades amigas con dinero público". A pesar del revuelo y de la investigación, todo apunta a que Colau no va a cambiar su proceder en este sentido. Así lo indican los 74.000 euros que la alcaldesa ha entregado al Observatorio DESC correspondientes a 2020 y 2021, una entidad en la que la propia Colau trabajó de 2007 a 2015 y que ya recibió más de 320.000 euros del consistorio en los últimos años. Por si fuera poco, según dicen fuentes cercanas a los interventores del Ayuntamiento, estos profesionales "llevan largo tiempo" avisando a la alcaldesa de que las subvenciones que concede a entidades colaboradoras, y que no dejan de incrementarse, presentan irregularidades. Dicen que entre los interventores es creciente el "enfado" por el modo en que se ningunean todos sus informes.
La frase 'Donde dije digo digo Diego' llega al BOE
Aunque resulte difícil de creer no se trata de una broma, sino de una situación real en la que el Boletín Oficial del Estado tuvo que recurrir este mes, de forma literal, a la expresión "Donde dije digo digo Diego". Todo se debe a la errata contenida en una orden anterior del Ministerio de Transición Ecológica, en la que se informaba de la adjudicación de uno de sus puestos técnicos. En el apartado "Nombre", que identificaba al adjudicatario, se le rebautizó como "Digo" cuando, obviamente, su nombre correcto es "Diego". Los errores de este tipo tienen que rectificarse en el BOE y este caso no podía ser una excepción, para regocijo de las redes sociales en las que se ha dado amplia difusión a tan pintoresca enmienda. De hecho, la propia ministra Teresa Ribera la comentó con humor en su perfil de Twitter.
Cs no se muda a pesar del recorte de subvenciones
Ciudadanos ha renovado por cinco años el contrato de arrendamiento de su sede nacional en Madrid. Un gran inmueble en la calle Alcalá al que el partido se mudó cuando tenía 40 escaños en el Congreso. Quizá por ello, se comenta en círculos políticos la sorpresa que ha generado que la formación naranja permanezca en su céntrica sede justo ahora, cuando sufre un importante recorte de subvenciones por sus debacles electorales.