El 2020, buen año para vender su negocio
Alejandro Zala
Durante los últimos meses, nuestra vida personal se ha visto profundamente impactada por los efectos del Covid-19. Al mismo tiempo, se ha creado un ambiente de incertidumbre económica que ha puesto en jaque a buena parte del tejido empresarial del país.
El nivel de incertidumbre para los próximos meses está en cotas nunca vistas. A pesar de la intención de las instituciones de apoyar los sectores más afectados, los bajos tipos de interés y el compromiso de los grandes inversores con sus empresas; la realidad es que el acceso a capital y talento está prácticamente cerrado para la pyme española.
La terrible coyuntura de factores negativos, la imperante necesidad de cambio y la falta de capital, hacen que este sea el momento ideal para que la pyme española busque el apoyo de un socio estratégico para impulsar la senda de crecimiento.
El acceso a capital y talento está prácticamente cerrado para la pyme española
Entre los cambios de consumo y aceleración de tendencias disruptivas provocadas por la crisis del Covid-19, hay factores que impactan directamente a las pymes. Algunos destacables: 1. Fuerte caída de la demanda: La pérdida de empleo y la consecuente caída de la renta y confianza por parte de los consumidores, ha hecho que la demanda por la mayoría de los servicios se desplome dramáticamente. No se espera que esta demanda se recupere hasta bien entrado el 2021 o incluso principios de 2022.
2. Transición hacia la digitalización y el e-commerce: Debido al cierre de negocios y espacios físicos, el movimiento de las ventas al canal digital se ha acelerado y parece que se ha quedado para siempre. Si las compañías no adaptan sus procesos y canales de venta a esta nueva realidad, será muy difícil que recuperen volúmenes de venta previos a la crisis.
3. Falta de solvencia y capital: Mantener y potenciar un negocio en este escenario resulta muy complicado, o imposible, sin acceso a capital financiero y humano. Los mercados de deuda están en teoría abiertos, pero la realidad es que su coste es excesivo para la mayoría de negocios y ponen en riesgo su viabilidad a medio plazo.
El fuerte impacto en las empresas acelerará la concentración en múltiples sectores, especialmente las empresas con menor capacidad financiera, que aunque tengan un modelo de negocio atractivo, pero poco resiliente a ciclos económicos, serán adquiridas a precios irrisorios o tendrán que cerrar.
Los emprendedores corren el riesgo de tener que aceptar una venta a la baja o asumir el cierre
Los empresarios que han dedicado su vida a la creación de negocios excepcionales y con gran impacto en su mercado, corren el riesgo de tener que aceptar una venta a la baja o asumir el cierre.
Una buena alternativa es encontrar socios que estén dispuestos en tomar el control (total o parcial) del negocio, que aporte el "pulmón" financiero para aguantar los próximos años, ayudar en la definición del nuevo modelo de negocio y evitar el terrible impacto con los empleados y en la comunidad local.
Hay socios e inversores que están activamente buscando pymes, para ayudar a empresarios a superar esta situación coyuntural y permitirle capitalizar el duro esfuerzo de haber construido un buen negocio.
Un mal socio o comprador puede convertirse en una pesadilla y por ello el proceso de búsqueda debe ser muy cuidadoso y considerar todos los riesgos implicados. Nuestra recomendación es asegurarse que haya una relación de confianza, transparencia y alineación de intereses por ambas partes.
El empresario debe entender los planes del potencial comprador para el futuro de la compañía y que el impacto en el negocio será positivo no solo para él, también para los empleados y el entorno en el que actúa.
Por lo tanto, antes de invertir esfuerzo se debe asegurar que los compradores/inversores:
1. Comparten visión a largo plazo. Hay pocos inversores con vocación de gestionar a largo plazo y responsablemente, no quieres un inversor oportunista.
2. Están capacitados para afrontar la situación de tu compañía. Se trata de procesos complicados en los que lidiar con profesionales con experiencia en este tipo de operaciones es fundamental
3. Garantizan discreción y transparencia. Es crítico mantener las conversaciones sobre una posible venta alejadas del entorno de la compañía, y las repercusiones negativas que estos procesos pueden temporalmente general en los empleados. Ser discreto no está reñido con ser transparente.
4. Buscar una solución buena para el empresario y equipo gestor es clave. El inversor no quiere heredar problemas y menos con el equipo directivo, por ello debe siempre mostrar flexibilidad en los términos económicos para garantizar una transición adecuada y mantener la alineación de intereses con todos los implicados en la transacción.