Opinión

Sectores clave en poder de Iglesias

    Podemos podría tener el control del Ministerio de Vivienda

    elEconomista.es

    El preacuerdo de Gobierno que Pedro Sánchez y Pablo Iglesias firmaron comienza ya a plasmarse en un reparto de cargos concreto. Iglesias asumirá una Vicepresidencia y su partido liderará tres ministerios. Dos surgirán de la creación de departamentos específicos para las competencias de Igualdad y Vivienda.

    Fue un organigrama ya ensayado en la primera legislatura de Rodríguez Zapatero, que recibió críticas por la ausencia de contenido en las funciones de estos ministerios. Sería un error dar por seguro que esa situación volverá ahora a repetirse, sobre todo, en el caso de Vivienda, cuya titular previsiblemente será Irene Montero. El hecho de que Iglesias propicie el nombramiento de su pareja sentimental como ministra ya sería grave, en la medida en que delata una concepción arcaica y personalista de la política.

    Dejar en manos de Podemos las competencias de vivienda supone allanar el camino a una intervención del mercado

    Pero más preocupante aún resulta la circunstancia de que todo apunta a que Montero actuaría como correa de transmisión del extremismo que Iglesias ha mostrado en sus ideas respecto al sector inmobiliario. Éstas incluyen la injusta criminalización de las socimis, tildándolas de instrumentos privilegiados fiscalmente, y, sobre todo, su interés por intervenir el mercado del alquiler residencial. Si resurgen los temores de una limitación de los precios de los arrendamientos no sólo se truncarán las numerosas inversiones que fondos privados planean en este sector. Además, lejos de abaratar los alquileres, reducirá la oferta y contribuirá a subirlos aún más. Por tanto, se equivoca quien vea en Vivienda o Sanidad (un ministerio este último también sujeto a negociaciones) departamentos menores que pueden confiarse a Podemos. En ellos se acumula poder suficiente para distorsionar mercados e impedir la libre competencia.