Motor
He tenido un accidente con el coche de sustitución, ¿tengo que pagar el arreglo?
- Es importante saber qué póliza tiene el coche de sustitución para evitar tener que pagar posibles arreglos
Raúl Mendoza
Antes de aceptar un coche de sustitución mientras tu vehículo está en el taller, es fundamental revisar detenidamente el seguro que lo cubre. No todos los coches de sustitución cuentan con las mismas coberturas, y podrías encontrarte con gastos inesperados en caso de accidente. Descubre todos los detalles sobre qué ocurre y qué debes hacer si sufres un accidente con un coche de sustitución.
Dejar el coche en el taller para una revisión rutinaria o para reparar algún desperfecto puede implicar que tu vehículo permanezca inmovilizado durante varios días. En el mejor de los casos, el taller te proporcionará un vehículo de sustitución para que puedas desplazarte sin inconvenientes. Si todo transcurre con normalidad, no debería haber ningún problema, pero ¿qué ocurre si arañas el coche o sufres un accidente con el vehículo prestado? ¿Quién se hace cargo de la reparación?
¿Qué ocurre si tengo un accidente con un vehículo de sustitución?
Al conducir un vehículo distinto al tuyo, es posible que necesites un tiempo de adaptación para familiarizarte con las marchas, las dimensiones del coche o la sensibilidad de los pedales. Esta situación puede generar incomodidad y, en casos desafortunados, derivar en un accidente.
Si esto ha ocurrido, deberás actuar de la misma manera que si tuvieras un accidente con tu coche habitual, avisar a las autoridades si hay heridos y, en caso contrario, elaborar un parte de accidente estableciendo las responsabilidades. Si el incidente no ha sido culpa tuya, el seguro del otro vehículo cubrirá los daños del coche de sustitución. No obstante, si el accidente es responsabilidad del conductor del coche prestado, la cobertura dependerá del tipo de seguro que tenga dicho vehículo.
Seguro de responsabilidad civil y cobertura de daños por el conductor
Este es el peor de los escenarios. Aunque no es habitual, si el seguro proporcionado por el taller o concesionario es de este tipo, solo contarás con la cobertura mínima obligatoria. Este seguro no cubre daños propios ni pérdida total del vehículo, lo que significa que podrías verte obligado a pagar los desperfectos. Por ello, antes de aceptar la cesión del coche, es fundamental revisar las condiciones del seguro para evitar sorpresas desagradables.
Seguro de responsabilidad civil con cobertura a todo riesgo con franquicia
Si el seguro es a todo riesgo con franquicia, se establecerá un importe mínimo a partir del cual se activará la cobertura. Si el coste de la reparación es inferior a dicha cantidad, deberá asumirla íntegramente la persona que haya firmado el contrato de cesión del vehículo. En caso de que el coste supere el importe mínimo, el firmante abonará el importe de la franquicia, mientras que el seguro cubrirá el resto de la reparación.
Seguro a todo riesgo sin franquicia
Este es el tipo de seguro más común en los coches de sustitución. Con esta cobertura, en caso de accidente, la póliza cubrirá los gastos de reparación y la persona que recibe el vehículo no se hará cargo de los desperfectos. Además, este tipo de contrato suele incluir ventajas adicionales, como asistencia en carretera, servicio de grúa, reparaciones en el lugar del incidente y traslados.
Dado que cada seguro tiene condiciones distintas, te recomendamos leer detenidamente el contrato antes de aceptar un vehículo de sustitución. Así, podrás evitar posibles contratiempos o gastos inesperados en caso de sufrir un percance con el coche prestado.