Motor

Toyota GR 86 Legacy Rally Concept y su decoración discutible

  • El GR 86 Legacy Rally Concept dicen que está inspirado en los videojuegos y quiere rendir tributo a la herencia de Toyota en rallys
  • Han elegido la decoración del Celica que supuso la descalificación durante dos años de Toyota por trampas

Miguel García

Toyota va a presentar en el SEMA 2024 de Las Vegas varios prototipos, pero uno de ellos hará frotarse los ojos incrédulos a los aficionados al automovilismo.

En Estados Unidos el Campeonato del Mundo de Rallies suena a algo muy lejano, aunque desean que vuelva. Toyota USA ha querido poner en valor los éxitos actuales desarrollando un concepto único, que combina un GR86 en su forma exterior y la mecánica del GR Corolla.

Un "swap" (como se dice en el argot) de envergadura, porque reemplaza la mecánica completa del GR86 por la de un GR Corolla (como la del GR Yaris, a la venta en España)

Toyota tiene una presencia en el World Rally Car indiscutible. En 2017 decidió volver a los rallys, colocando en la dirección del expiloto pluricampeón Tommy Makinen. Desde entonces lleva cuatro títulos de marcas (y cinco de pilotos), que podrían ser uno más a final de noviembre. Buen momento para poner en valor la hazaña.

¿Yaris?¿Qué es Yaris?

En el Mundial de Rallies, el Yaris WRC es una herramienta ideal, pero quizá los norteamericanos no pueden imaginarse que un coche tan pequeño pueda ser atractivo. Allí, un coche pequeño es un Corolla y para el SEMA 2024 la mecánica que equipa al coupé GR86 Legacy Rally procede de un GR Corolla. "Casualmente", la misma que la del GR Yaris, punto de partida para el Yaris WRC.

Sus trescientos caballos puede que no superen las capacidades del chasis del coupé GR86. Además, el motor es ligero, con solo tres cilindros. Lo que incomoda y hace notable esta peculiar intervención es que el GR86 nació con un motor bóxer, horizontal y bajito, como tantos Subaru. No hay que olvidar que Toyota y Subaru comparten la paternidad de este coupé, que se vende también como Subaru BRZ. Cómo encajar un motor vertical en un capó tan bajo constituye un reto idóneo para un certamen como el SEMA, especializado en las preparaciones de vehículos, cuanto más increíbles, mejor.

El motor horizontal y en sentido longitudinal del GR86 se sustituye por uno en posición transversal, y dispuesto en vertical, como el 99 por ciento de los coches

Consideran que, por tamaño, el motor podría encajar. En cualquier caso, han tenido que diseñar toda la cuna delantera con subchasis a medida y soportes de motor específicos para dejar espacio a las transmisiones delanteras y la suspensión. No hay que olvidar que el cupé es un propulsión trasera, y que no fue concebido para incorporar unos semiejes delanteros, propios de la tracción total del modelo de base para rallies. Se necesitaron nuevos muelles y amortiguadores y brazos específicos para la suspensión. También hubo que ajustar la dirección.

Prominentes escapes centrales, en lugar de los tres colines de escape del Corolla GR y un alerón que recuerda incluso a los Toyota Supra de los 90

Por suerte, el GR86 ya es propulsión trasera y no hay que tocar nada, pensarás. Te equivocarías. Hubo que encajar el puente completo del Corolla para mantener las relaciones de transmisión, el reparto de potencia variable entre los ejes y la electrónica que lo controla.

Un interior que no es ni de GR86, ni de GR Corolla, sino más propio de un WRC de competición

No han dado cifras de prestaciones, pero las fotos revelan una dotación de equipo de seguridad de primera línea, más propia de un WRC que para circular por la calle. Frenos enormes, liberadores rápidos de capós, asientos de competición con cinturones de tipo arnés, barras antivuelco. Incluso la palanca de cambios está sobre-elevada, para facilitar los pasos de marcha.

¿Y por qué no la decoración "Carlos Sainz"?

Quizá sea una cuestión de juventud, porque, como dicen, se han inspirado en los videojuegos. Pero resulta que se han elegido la decoración del Celica GT4 de Castrol para rememorarlo. Por supuesto, un coche icónico y que, como recuerdan los responsables de Toyota en Norteamérica, evoca memorias del legendario coche de rallys en los entusiastas y es muy popular en videojuegos. Pero, ¿ese atuendo con los colores de Castrol? Era el que lucían el año de su descalificación, en 1995 y 1996, por trampear la entrada del turbo.

Cartel conmemorativo de las numerosas participaciones del Celica en el Mundial de Rallies

Cierto, estaban muy limitados para elegir, porque tampoco podían haberlo vestido de Marlboro (por tabaco, a pesar de ser acertada y sutil).

Aquel Toyota Celica GT4 Edición Carlos Sainz, celebración del Grupo A (detrás) decorado con los soles de la bandera japonesa

Podrían haber elegido aquél de los soles de la bandera japonesa en cada aleta, el que inspiró la edición limitada Celica GT4 Carlos Sainz. Quizá la bandera japonesa no resulte políticamente correcta. Y, al fin y al cabo, los colores de un petrolero tan implicado desde hace años en todo tipo de competiciones de motor en todo el mundo, puede ser parte del homenaje. Por mucho que a esos aficionados acérrimos les traiga el recuerdo de un momento oscuro en el mundo del deporte.