Motor
Un Nissan Qashqai mejor que el Qashqai
- Renovación del Nissan Qashqai a mitad de su vida comercial
- Google integrado, cuero y Alcántara en el interior, más mejoras en los sistemas de asistencia a la conducción constituyen sus principales nuevos atributos
Miguel García
Refresco de imagen para la tercera generación del Nissan Qashqai, que mejora la presentación interior de los acabados más altos, incorpora nuevos sistemas de asistencia a la conducción e integra las aplicaciones de Google.
Si a una inteligencia artificial le hubieran dicho que creara una imagen de guerrero samurai para el frontal del Nissan Qashqai que se acaba de presentar, creemos que habría propuesto algo muy parecido a esta generación "tres y medio" del Qashqai. Parece que fue ayer cuando nació la tercera generación, pero estamos ante la dosis de mejoras tradicional a mitad de su vida comercial. De lo más llamativo del nuevo Qashqai, que continúa produciéndose en la planta británica de Sunderland, es que se podrá reconocer a primera vista que lo han modificado, lo que no siempre sucede en los restyling.
Por si solo quisieras tener un rapidísimo resumen que lo que cambia, te podemos decir que:
- además del mencionado frontal, asemejando un tapiz de "comas" en 3D, y paragolpes,
- el acabado N-Design ofrece llantas de 20 pulgadas,
- y en el interior, asientos de cuero con aspecto acolchado y un salpicadero modificado, parcialmente revestido en Alcántara.
- Han integrado Google, lo que mejorará el funcionamiento de las aplicaciones de uso común en el teléfono a bordo del coche y también las instrucciones vocales.
- Como en julio de 2024 todos los coches tendrán que adoptar unos niveles mínimos en cuanto a sistemas de ayuda a la conducción, el Qashqai sube también el nivel de los ADAS para diferenciarse.
Disponible con e-Power
Comenzando por la parte de electrificación, el Qashqai continúa ofreciendo el sistema e-Power, que tanto costó llegar a Europa, a pesar de haber sido un éxito fulminante en Japón cuando lo lanzaron en el Nissan Note.
Aparentemente, la mecánica e-Power sigue inalterada respecto al anterior Qashqai. Se trata de un sistema de propulsión puramente eléctrica, a través de un motor eléctrico de 140 kW que son equivalentes a 190 CV de potencia. La clave para el usuario es que no se puede enchufar y que la electricidad la produce un motor de gasolina. Se trata de un motor específicamente desarrollado para esta misión, sofisticado, con tres cilindros, turbocompresor, y algo nada habitual, compresión variable para obtener la máxima eficiencia en el uso del combustible. De eso se trata, porque no es más que un generador de electricidad.
La energía que no usa directamente el motor eléctrico, se almacena en una batería de 2,1 kWh de capacidad, que también puede mover el vehículo mientras tenga carga. Esta mecánica proporciona las mismas sensaciones de conducción que un vehículo eléctrico, incluyendo la frenada regenerativa y la conducción de un solo pedal, característica de muchos de ellos.
Merecería la pena esperar por el Qashqai
Desde que los teléfonos fueron capaces de conectarse con los coches, pocos usuarios se sintieron a gusto con la integración, y daba igual la marca del coche. La excusa tradicional era que los teléfonos Android tenían demasiados sistemas operativos y personalizaciones según la marca del móvil, por lo que Apple salía bastante mejor parado. Ahora, además de permitir la conexión inalámbrica, el sistema de Google estará integrado en el nuevo Qashqai. Con ello el funcionamiento de las apps será mucho más fluido y rápido, las actualizaciones de los mapas serán constantes y se podrán descargar las aplicaciones disponibles en Google Play. Las instrucciones al Asistente de Google también se podrán utilizar para controlar el sistema de ventilación, la calefacción de asientos y parabrisas, por ejemplo. Apple Carplay, Alexa o los Servicios Conectados de Nissan están presentes también en el renovado Qashqai.
La pantalla táctil central no parece más grande que antes, que era de 12,3 pulgadas, pero al eliminar los mandos que tenía a los lados, la superficie activa de leds sí parece ser más grande. Nissan no ha caído en la tentación de que, en la utilización convencional del vehículo, se tenga que pasar por las funciones táctiles de la pantalla. El Qashqai sigue contando con mandos físicos bien organizados para la climatización. Sin necesidad de toquetear la pantalla y buscar la adecuada entre menús, se podrá pasar de una canción a otra, activar las cámaras periféricas del vehículo o modificar el volumen con mandos específicos, aunque ha perdido algunos de ellos.
El cuadro de instrumentos TFT ha cambiado ligeramente algunos gráficos, e incluso ofrece la opción de un modo de información "minima", para reducir la distracción del conductor.
ADAS mejorados
Según Nissan, se ha recalibrado el sistema de frenada automática de emergencia para responder con mayor rapidez. Además de actuar ante el riesgo de colisión, es capaz de reconocer peatones o ciclistas e intervenir. Si la frenada de emergencia se hace por encima de 60 km/h desencadena el rápido parpadeo de las luces de freno para advertir al resto de conductores.
Como obliga ahora la norma, incorpora el sistema inteligente de asistencia de velocidad, que alerta en caso de superar los límites establecidos, y está activo desde que se arranca el coche, lo mismo que el sistema de mantenimiento de carril. Éste también actúa por encima de los 60 km/h, con vibraciones en el volante.
El Qashqai estrena la posibilidad de ajustar de manera precisa el nivel de intervención de los diferentes sistemas de asistencia mediante un proceso de dos pasos, a través de los mandos del volante.
Realidad virtual con el capó transparente
Se ha mejorado la visión 360 alrededor del coche mediante cámaras, un equipo que estrenó el primer Qashqai, pero que, fuera por el tamaño o calidad de pantallas o cámaras, nunca terminó de explotar. Ahora ofrece una función 3D que permite al conductor seleccionar hasta ocho puntos de vista distintos del coche para visualizar mejor posibles peligros. Se combina con alerta de detección de movimientos alrededor y el uso de realidad virtual para crear un "capó transparente", que permite ver en la pantalla central dónde pisan las ruedas para una mejor precisión en las maniobras.
También se ofrecerá un sistema de memorización de aparcamiento, en ciertas ubicaciones que el vehículo reconoce automáticamente mediante localización GPS. Gracias a él, el vehículo puede memorizar las maniobras de aparcamiento de lugares especialmente estrechos o en los que sea difícil maniobrar. Posteriormente, al llegar a ese lugar, podrá reproducir exactamente la misma maniobra si el conductor lo desea.
Todas las unidades del Qashqai lucirán distintivo Eco y su consumo homologado seguirá invariado, estando entre 5,1 y 5,3 l/100km en el caso del e-Power. Las versiones "mild-hybrid", con un motor 1.3 de gasolina, homologan consumos entre 6,2 y 7,1 l/100km.