Motor

Nissan prevé una rentabilidad operativa del 6% en 2026 y reducir los costes de los eléctricos un 30%

  • La nipona prevé que la paridad de precio entre los eléctricos y los modelos de combustión se alcance en 2030
  • Lanzará 30 modelos hasta 2030, 16 de ellos electrificados, y planea elevar las ventas en 1 millón para 2027
  • La multinacional estima un retorno para los accionistas superior al 30%
Makoto Uchida, presidente y consejero delegado de Nissan. Foto: Toru Hanai

Ankor Tejero

Nissan ha presentado su hoja de ruta, denominada The Arc, para los próximos tres años. Una estrategia caracterizada por lograr un margen operativo de al menos el 6% para finales del ejercicio fiscal 2026. El nuevo plan se divide en imperativos en el medio para los años fiscales 2024 a 2026, y acciones que se llevarán a cabo hasta 2030. La compañía prioriza así el valor sobre los volúmenes, tal y como vienen haciendo los fabricantes tradicionales para adaptarse a la electromovilidad y a la llegada de los fabricantes chinos.

Para lograr estos objetivos, Nissan reducirá un 20% su capacidad de producción, al tiempo que lanzará 30 nuevos modelos al mercado —de los que 16 serán modelos electrificados y 14 de combustión— y a través de asociaciones. Asimismo, la multinacional nipona prevé optimizar su portfolio de productos. Para finales del ejercicio fiscal 2026 prevé que el mix de modelos eléctricos sea del 20%, otro 20% corresponderán a modelos híbridos enchufables y el 60% restante serán modelos de combustión interna. Nissan planea lanzar un total de 34 modelos electrificados entre los años fiscales 2024 y 2030 para cubrir todos los segmentos, y se espera que la combinación de modelos de vehículos electrificados represente el 60% al final de la década.

Makoto Uchida, presidente y consejero delegado de Nissan, ha explicado que "este plan nos permitirá ir más lejos y más rápido en el impulso del valor y la competitividad. Ante la extrema volatilidad del mercado, Nissan está tomando medidas decisivas guiadas por el nuevo plan para garantizar un crecimiento y una rentabilidad sostenibles".

Nissan primero tomará medidas para garantizar el crecimiento del volumen a través de una estrategia regional personalizada y se preparará para una transición acelerada a los vehículos eléctricos, respaldada por una cartera equilibrada de productos electrificados y de combustión, un crecimiento del volumen en los principales mercados y disciplina financiera.

A través de estas iniciativas, Nissan pretende aumentar las ventas anuales en 1 millón de unidades y elevar su margen de beneficio operativo a más del 6%, ambos para finales del año fiscal 2026. Esto allanará el camino para la segunda parte del plan destinado a permitir hacer la transición a los vehículos eléctricos y lograr un crecimiento rentable a largo plazo, respaldado por asociaciones inteligentes, una mayor competitividad de los vehículos eléctricos, innovaciones diferenciadas y nuevas fuentes de ingresos. Para el año fiscal 2030, Nissan prevé un potencial de ingresos de 2,5 billones de yenes (15.274 millones de euros al cambio actual) provenientes de nuevas oportunidades comerciales.

Reducción del coste de los eléctricos

La ofensiva de productos estará respaldada por nuevos enfoques de desarrollo y fabricación destinados a hacer que los vehículos eléctricos sean más asequibles y aumentar la rentabilidad. Así, la multinacional japonesa prevé reducir el coste de los vehículos eléctricos de nueva generación en un 30% en comparación con el modelo actual Ariya y lograr la paridad de costes entre los modelos eléctricos y los de combustión para el ejercicio fiscal 2030.

El plan incluye propuestas para acelerar la evolución de las tecnologías de inteligencia de vehículos, como el sistema de asistencia al conductor ProPILOT de próxima generación, que implementa tecnología de conducción autónoma puerta a puerta, tanto dentro como fuera de la carretera, en locales privados y en estacionamientos.

Para lograr estos objetivos, Nissan ofrecerá baterías de litio NMC (níquel, manganeso y cobalto), de ferrofosfato de litio (LFP) y de estado sólido mejoradas para proporcionar vehículos eléctricos diversificados que satisfagan las diferentes necesidades de los clientes. Nissan mejorará significativamente las baterías de iones de litio NCM, reduciendo el tiempo de carga rápida en un 50% y aumentando la densidad de energía en un 50% en comparación con el Ariya. Se lanzarán baterías LFP, que se desarrollarán y producirán en Japón, y reducirán el costo en un 30% en comparación con el minivehículo eléctrico Sakura. En el año fiscal 2028 se lanzarán nuevos vehículos eléctricos con baterías mejoradas de iones de litio NCM, LFP y de estado sólido.

La compañía aprovechará las alianzas estratégicas que mantiene en la actualidad. Así, mantendrá la alianza con Renault y Mitsubishi Motors en Europa, Latinoamérica, la Asean e India. En China, Nissan utilizará plenamente sus activos locales para satisfacer las necesidades de China y más allá; al tiempo que explorará nuevas asociaciones en Japón y EEUU. Se desarrollarán y adquirirán baterías con socios para aportar 135 gigavatios hora de capacidad global. Nissan quiere tener una capacidad de producción de baterías para 2030 de 10 GWh en Japón, de 25 GWh en Europa, de 40 GWh en China y de 60 GWh en Estados Unidos.

De hecho, Nissan y Honda firmaron a mediados de febrero un memorando de entendimiento en virtud del cual comenzarán un estudio de viabilidad para producir componentes y software para vehículos eléctricos.

El plan se sustenta en una firme disciplina financiera, que permite mantener estable el ratio de inversión en Capex e I+D frente a los ingresos netos entre el 7% y el 8%, excluyendo la inversión en capacidad de baterías. Además, Nissan planea invertir más de 400.000 millones de yenes (2.442 millones de euros )en capacidad de baterías. Mientras tanto, la inversión en electrificación aumentará progresivamente, hasta superar el 70% en el año fiscal 2026. Con estas medidas, unido a mantener un flujo de caja positivo antes de las fusiones y adquisiciones, Nissan estima lograr un retorno total para los accionistas superior al 30%. Además, la compañía prevé que durante toda la vigencia del plan Arc la tesorería neta se mantenga en 1 billón de yenes (6.105 millones de euros al cambio actual).