Estas son las carreteras más peligrosas de España: hay 9 consideradas de alto riesgo

Un informe del RACE pone de relieve dónde están los tramos de carreteras más peligrosos de nuestra red viaria. Algunos son consideradas como puntos de riesgo e incluso alguno es reincidente en esta lista negra.

Comienza la Operación Salida de Semana Santa y se contabilizarán millones de desplazamientos en coche por carretera. Si vas a ser uno de los afortunados en viajar estos días, seguro que te interesa conocer los últimos datos de evaluación de las carreteras.

La Fundación RACE, como miembro de iRAP (Programa Internacional de Evaluación de Carreteras), ha llevado a cabo el informe de Evaluación de estado de la Red de Carreteras del Estado (RCE) del periodo 2020-2022. Han sido 25.100 los kilómetros analizados, así como su relación con los datos de accidentalidad que se han registrado durante esos años. El informe muestra un riesgo elevado de peligrosidad (medio-alto y alto) en 1.974 kilómetros, lo que supone casi un 8% sobre el total de km de la red de carreteras analizada.

Para la elaboración del informe se han tenido en cuenta un total de 2.987 accidentes ocurridos en la Red de Carreteras del Estado entre 2020-2022, de los cuales 982 fueron accidentes mortales, con un saldo de 1.096 fallecidos y 2.616 heridos graves, sucedidos en los tres años de estudio.

Los tramos más peligrosos en las carreteras españolas

Según los datos del informe se han localizado un total de 56 tramos de Riesgo Elevado (8 más que en el informe anterior), de los cuales 9 son tramos "Negros", considerados de Riesgo Alto para la seguridad de sus usuarios. Por otra parte, hay 47 tramos considerados "Rojos", calificados de Riesgo Medio-Alto.

En concreto, la N-6, en Galicia, entre los puntos kilométricos 517,1 y 528,5, es la carretera con un mayor riesgo para sufrir un accidente grave. Estos son los 9 tramos más peligrosos:

N-6. Km 571,1 a 528,5 (Galicia): índice de riesgo de 123,8

N-323. Km 172,5 a 190,3 (Andalucía): índice de riesgo de 119,9

N-631. Km 0 a 14,4 (Castilla León): índice de riesgo de 118,3

N-345. Km 0 a 7,2 (Región de Murcia): índice de riesgo de 101,2

N-432. Km 388,3 a 399,8 (Andalucía): índice de riesgo de 100,3

N-502. Km 62,4 a 77,4 (Castilla León): índice de riesgo de 98,9

N-634. Km 232,8 a 243,1 (Cantabria): índice de riesgo de 98,2

N-340. Km 940 a 954,2 (Comunidad Valenciana): índice de riesgo de 97,7

N-642. Km 0 a 8,2 (Galicia): índice de riesgo de 93,0

El "índice de riesgo" es definido como el número de accidentes mortales y graves ocurridos en un tramo por cada 1.000 millones de vehículos kilómetro.

Por Comunidades Autónomas, Cataluña es la que presenta una mayor proporción de carreteras consideradas de riesgo elevado, con el 11,3% de vías, seguida de Castilla y León con 9,9 %.

Los tramos que preocupan especialmente son el de la N-323 en Granada (entre los kilómetros 172,5 y 190,3 ), el de la N-634 entre los Km 232,8, y el 243,1 en Cantabria, ya que llevan repitiéndose entre los más peligrosos de España desde el informe de 2019 y 2021.

El tramo de la N-345 en la provincia de Murcia (entre los kilómetros 0 y 7,2) es el más preocupante de todos, ya que tiene un índice de riesgo alto desde el informe de 2017 al 2019.

¿Cuál es el perfil de las carreteras más peligrosas?

Pero ¿qué características suelen tener las carreteras consideradas más peligrosa? Según la metodología iRAP, existen determinadas características que coinciden en la gran mayoría de los tramos más peligrosos de carreteras en España. Por ejemplo, se trata de una carretera convencional, posee una calzada única, tiene intersecciones al mismo nivel y la Intensidad Media Diaria (IMD) de circulación está por debajo de los 10.000 vehículos/día.

En el sentido contrario, las carreteras más seguras son, paradójicamente, aquellas por las que circulan más vehículos. En ellas se producen menos accidentes por cada coche que pasa, no se invade el sentido contrario, no hay intersecciones al mismo nivel y, al disponer de unos mayores niveles de seguridad pasiva, los accidentes tienen menores consecuencias.

Hay que añadir que, a pesar del elevado número de puntos peligrosos en España, la evolución de los accidentes mortales es muy positiva, con una reducción de más del 73% respecto al año 2009, que fue el inicio del estudio, y un 50% frente a los datos de la última década (2013 -2023).