Motor

Porsche ya produce e-fuels con cero emisiones de CO2 en Chile

  • Fabricados a partir de agua y CO2 y con el empleo de energía eólica permiten incluso un balance negativo de emisiones
  • Es una solución para el transporte a corto y medio plazo, tanto por carretera como aéreo o marítimo
  • Permite ofrecer una segunda vida sin emisiones a los 1.400 millones de coches que circulan por el mundo con motor térmico
Esta es la planta de Haru Oni, en la región chilena de Punta Arenas.

Carlos Cancela

Porsche da un paso adelante hacia la sostenibilidad del automóvil con la puesta en marcha de la planta de producción de e-fuels en Chile.

Porsche, y con ello el grupo Volkswagen da un importante paso adelante hacia el empleo de e-fuels con la puesta en marcha de la planta de producción de estos combustibles del futuro que permitirán utilizar coches con motores térmicos pero con unas emisiones cero de CO2. Esta planta está situada en la región de Punta Arenas, en Chile.

La inauguración de esta planta tuvo lugar la pasada semana con la presencia del Ministro de Energía de Chile, Diego Pardow. Se trata de la factoría piloto de Haru Oni, en Punta Arenas. Con esta importante inauguración, Porsche y los socios internacionales que trabajan en colaboración con la empresa chilena Highly Innovative Fuels (HIF), han comenzado allí la producción industrial de combustibles sintéticos o e-fuels.

En la ceremonia de inauguración, Barbara Frenkel y Michael Steiner, miembros del Consejo Dirección de Porsche AG, repostaron un Porsche 911 con los primeros litros de combustible sintético producidos en las instalaciones.

Agua y CO2

Estos combustibles e-fuels, están fabricados a partir de agua y dióxido de carbono con la ayuda de energía eólica permiten el funcionamiento prácticamente neutro en emisiones de CO2 de los motores de gasolina. Es más, al ser la fuente de energía necesaria para el proceso completamente renovable, la producción de estos combustible no solo es cero emisiones sino que incluso es capaz de quitar CO2 de la atmósfera. Y lograr un balanc

El empleo de e-fuels permitirá una segunda vida para 1.400 millones de coches en el mundo.

Y tienen una ventaja muy importante, ya que permiten seguir utilizando de manera 100% limpia los vehículos con motor térmico, que de otra manera están obligados a desaparecer. En la actualidad hay más de 1.400 millones de coches circulando en el mundo con motor térmico y la obligación de usar solo coches eléctricos supondría su fin.

Por ello, esta puede ser una muy buena solución al menos a medio plazo para reducir las emisiones en el transporte. Este mismo tipo de combustibles e-fuels se puede utilizar también en el transporte aéreo o marítimo y también por supuesto en el de carretera con los camiones.

En este sentido, es muy importante la apuesta que ahora estrena Porsche tras muchos años de desarrollo de este proyecto. La apuesta de la marca de Stuttgart por la energía alternativa es doble: movilidad eléctrica, con el Taycan como primer exponente, complementada con combustibles sintéticos que reducen las emisiones de dióxido de carbono a cero.

Pero teniendo en cuenta el volumen del parque automovilístico mundial, la producción industrial de combustibles sintéticos debe seguir impulsándose en todo el planeta. Con la planta piloto de e-fuels, Porsche desempeña un papel de liderazgo en este desarrollo del futuro.

En la fase piloto de esta planta de producción de Chile está prevista la producción de unos 130.000 litros de e-fuels anuales. Inicialmente, el combustible será utilizado en proyectos de pequeña escala, entre ellos las carreras de la Porsche Mobil 1 Supercup y los repostajes de los coches de los Porsche Experience Centers.

Energía eólica

Tras la fase piloto que ahora está en marcha, la primera ampliación en Chile, prevista para mediados de la década, incrementará la producción hasta los 55 millones de litros anuales. Unos dos años más tarde, se espera que la capacidad pueda llegar hasta los 550 millones de litros cada año.

Esta región del mundo ofrece unas condiciones ideales para la producción de combustibles sintéticos, ya que el viento sopla unos 270 días al año, lo que permite que las turbinas eólicas funcionen a pleno rendimiento. Además, Punta Arenas está situada cerca del Estrecho de Magallanes y, desde el puerto de Cabo Negro, los e-fuels pueden ser transportados de la misma manera que los combustibles tradicionales y pueden ser distribuidos utilizando la infraestructura existente.

Porsche está trabajando para conseguir un balance neutro de dióxido de carbono en toda la cadena de valor a partir de 2030. Esto también incluye la fase de uso para los futuros modelos totalmente eléctricos. Los combustibles sintéticos complementan la electromovilidad y forman parte de la estrategia de energía sostenible del fabricante de vehículos deportivos. Paras ello, Porsche ya ha invertido más de 100 millones de dólares en el desarrollo y producción de e-fuels.