Bolsa, mercados y cotizaciones

La deuda corporativa gana un 8% en el año de la mano del BCE y la Fed

  • Los precios repuntan un 2,6% en junio, su mejor mes en 3 años
El mercado descuenta otro programa de compras de deuda de Mario Draghi

Isabel Blanco

Contra muchos pronósticos, el balance de la primera parte del año para la renta fija está siendo más que positivo. Con el semestre casi acabado, el precio de la deuda a nivel global ha subido un 5,65%, según el índice de Bloomberg y Barclays, con la consiguiente reducción de los rendimientos que ofrecen. Pero lo que mejor se ha comportado, con diferencia, es la deuda corporativa, que acumula ingentes ganancias en el año. El Bloomberg Barclays Global Aggregate Corporate, un índice que recoge una cesta de bonos corporativos con grado de inversión tanto de países desarrollados como emergentes, se sitúa en máximos históricos, al repuntar un 8% en los seis primeros meses de 2019.

Junio ha sido clave. Este mes puede acabar como el mejor para la renta fija corporativa desde marzo de 2016; gana un 2,60%, según el mismo índice. A la gran liquidez que hay en mercado, se une el giro tanto del Banco Central Europeo (BCE) como el de la Reserva Federal estadounidense (Fed). Ante las bajas expectativas de inflación, y en un entorno en el que sigue presente la ralentización de la economía rodeada, además, de incertidumbres, este mes ambos bancos centrales han vuelto a poner sobre el tablero de juego la posibilidad de ser más laxos con sus políticas monetarias.

"La combinación de menores rendimientos de la deuda pública y spread crediticios más estrechos ha impulsado los retornos de la deuda corporativa este mes", señala Chris Iggo, director de inversiones y responsable de renta fija en AXA IM, apuntando hacia la flexibilización en las políticas monetarias.

Otro programa de compras

Los inversores no han tardado en recoger el órdago lanzado por Mario Draghi, el presidente del BCE, quien trasladó la idea de estímulos adicionales. "El mercado de bonos está anticipando una reanudación del programa de compra de activos [del BCE], lo que podría elevar el precio de la deuda. Dado que una gran parte de la curva de rendimiento de los bonos gubernamentales alemanes, franceses e incluso españoles se encuentra en territorio negativo, el mercado espera una mayor participación en las compras del sector corporativo en esta ocasión", destacan en Julius Baer.

Nicolo Carpaneda, director de inversión del área de renta fija de M&G Investments para España y Portugal, calcula que un nuevo QE del BCE podría relajar la rentabilidad de los bonos corporativos del 1% que rinde ahora de media hasta el 0,6%. Según sus cálculos, existen 950.000 millones de euros de bonos corporativos elegibles en Europa, y el BCE ha comprado solo 178.000 millones de euros, por lo que, sin saltarse sus propias normas, aún tendría margen para comprar.

Mayores subidas en EEUU

En el caso de la Fed, una posible bajada de los tipos de interés que ponga freno a la normalización que inició la institución en diciembre de 2015 también está presionando a la baja los rendimientos de los bonos estadounidenses. El mercado la descuenta este mismo mes de julio; mientras en el seno de la Fed no está tan claro si será este año o el que viene. Pero la deuda corporativa emitida en dólares ya gana un 9,6% en la primera parte del año. Las ganancias son incluso mayores en los títulos calificados como bonos basura o high yield, ya que suman cerca de un 10% en el semestre. Precisamente las bajas rentabilidades exigidas está incentivando a las compañías con este rating a salir a financiarse en los mercados de capitales.

"En bonos corporativos tanto europeos como americanos, a pesar de la ralentización en las expectativas de crecimiento, la extensión de condiciones de financiación laxas sirve de soporte", opinan desde Bankinter. "El mercado de crédito es el único reducto de valor de cara a la segunda mitad del año", cree Víctor de la Morena, director de inversiones de Amundi Iberia.