Bolsa, mercados y cotizaciones
José Cobos (NYSE): "El mercado se siente cómodo invirtiendo en tecnológicas no rentables porque apuestan por su potencial"
- "Las firmas que debutaron en 2018 suman ganancias del 40%"
José Luis de Haro
Nueva York,
Aprovechando el desembarco de Uber Technologies en la New York Stock Exchange, donde comenzó a cotizar el pasado viernes, elEconomista repasa con Jose Cobos, el director de mercados de capital en el sector tecnológico de la Bolsa de Nueva York, las expectativas sobre los unicornios, como se conoce a las compañías generalmente tecnológicas con un valor superior a los 1.000 millones de dólares en el mercado privado, que planean seguir los pasos de la empresa capitaneada por Dara Khosrowshahi. Uber se postuló como el desembarco más grande del año, pero sus títulos todavía no han logrado superar los 45 dólares fijados antes de su primera cotización.
¿Por qué estamos viendo tantos 'unicornios', como Uber o Pinterest, salir a bolsa? Al fin y al cabo, durante los últimos años, el capital de riesgo y los inversores institucionales han conseguido capitalizar estas compañías mientras han engordado su valor...
Existen una serie de razones por las que estas compañías deciden cotizar públicamente. La principal es la necesidad de recaudar mucho más capital del disponible en el mercado privado y reforzar sus balances. Otro factor importante es la ampliación de su base de inversores. Pero quizás lo más importante es la oportunidad que esto ofrece a la hora de fortalecer la marca y la compañía. Además, ser una empresa cotizada obliga a someterse a una serie de regulaciones y escrutinios por parte de los reguladores.
En la caza de 'unicornios' existe una clara competencia entre el NYSE y el Nasdaq. ¿Qué diferencia hay para estas compañías al elegir una plaza bursátil u otra?
La principal diferencia entre nosotros y nuestros competidores reside en el modelo de negocio. En nuestro caso, todavía tenemos la interacción de la mano humana, que ayuda a la hora de gestionar la salida a bolsa y reducir la volatilidad. Precisamente, esa intersección humana y tecnológica nos brinda una capacidad mucho mayor para gestionar las compañías que cotizan aquí. Se nos reconoce por una impecable ejecución. En lo que al sector tecnológico se refiere, hemos cambiado nuestros requisitos de listado y permitimos que las empresas que no son rentables ingresen en el NYSE. Como resultado, a largo de los últimos cinco años, hemos acaparado el 75% de todas las recaudaciones de compañías tecnológicas que han salido a bolsa.
No obstante, hay estudios que señalan que el 80% de los 'unicornios' que han salido a bolsa no son rentables. Este porcentaje se asemeja a los niveles de la 'burbuja' del 2000. ¿Debería preocuparnos? ¿Cómo deben los inversores abordar este tipo de nuevas compañías?
Las empresas principalmente tecnológicas que están saliendo a bolsa no son rentables porque abordan mercados realmente grandes, supone una disrupción del actual statu quo y están concentradas en aumentar su cuota de mercado. Como resultado, están invirtiendo en su negocio y tratando de encontrar la forma de asegurar su competitividad. Eso requiere una tremenda cantidad de capital. Las tecnológicas que salen al mercado actualmente son distintas a las que vimos hace dos décadas. Llevan operando mucho más tiempo, además de tener mejores procesos, estructuras y controles. Como resultado, tienen mucha más escala. Y cuando se observan los ingresos directos y los costes expresados en base por unidad (unit economics, en inglés) relacionados con los modelos de estas compañías, algunas son realmente rentables. Más bien es una cuestión de si deben continuar invirtiendo para hacer crecer su negocio o traspasar parte de ello a su base de posibles beneficios. Lo que el mercado realmente está buscando en estas compañías es crecimiento y se siente cómodo invirtiendo en compañías que no son rentables porque encuentran dicho potencial de crecimiento.
Con la salida a bolsa de Uber ya hemos registrado posiblemente el mayor estreno del año. En un momento de incertidumbre por las tensiones comerciales, el próximo movimiento de la Reserva Federal o el rumbo que tome la actividad económica, ¿qué perspectivas hay para este mercado?
Seguimos siendo muy optimistas. Obviamente, el mercado alcista suma ya diez años, pero creo que una de las cosas que no debemos perder de vista es que todavía hay mucha menos volatilidad que la dictada por normas históricas. Al mismo tiempo, el comportamiento de las salidas a bolsa más recientes, específicamente dentro del sector tecnológico, ha sido bastante bueno. El grupo de tecnológicas que han salido a bolsa en 2018 y lo que llevamos de 2019 acumula una rentabilidad del 40% frente a poco más del 10% de los principales índices. Por ello no es sorprendente que los inversores se fijen en estas compañías y que más empresas tecnológicas quieran salir a bolsa en un momento en el que todavía registramos una volatilidad relativamente baja. Francamente, las valoraciones que se están consiguiendo van a seguir despertando el apetito para las compañías que planeen su estreno en bolsa.