Bolsa, mercados y cotizaciones

El mercado mexicano descuenta la victoria de AMLO este domingo

  • El IPC cae más de un 4% en el año y el peso espera plano
Imagen: Reuters.

Mónica G. Moreno

Ya solo queda ir a las urnas. Este domingo los ciudadanos mexicanos elegirán al que será presidente del país durante los próximos seis años. Las encuestas le dan la victoria a Andrés Manuel López Obrador (AMLO) -candidato del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) que se presenta con la coalición Juntos Haremos Historia- con casi el 50 por ciento de intención de voto.

La lucha contra la corrupción, una política de austeridad o la revisión de contratos energéticos son algunas de las propuestas que el candidato de la izquierda ha defendido durante la campaña -ver página 15-. Su discurso, calificado de populista, ha sembrado la hostilidad en el mercado. De hecho, personalidades de algunas cotizadas del Índice de Precios y Cotizaciones (S&P/BMV IPC) se han pronunciado en contra del que fuera alcalde de la Ciudad de México. Sin embargo, el propio AMLO y sus colaboradores han intentado mostrar una actitud conciliadora con empresarios locales e internacionales, por lo que el mercado tiene descontada su victoria.

"Aunque los observadores del mercado han mostrado su preocupación, la realidad de la posible presidencia de AMLO sigue siendo incierta, ya que ha designado a grandes expertos para formar parte de su consejo de ministros y se ha comprometido ante los líderes empresariales a que no habrá expropiaciones ni nacionalizaciones", indica Sophia Whitbread, gestora del BNY Mellon Global Emerging Markets Fund en Newton.

La incertidumbre electoral lleva al selectivo a ceder más de un 4 por ciento en 2018, pero no ha sido el único motivo, ya que también se ha visto afectado por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y la guerra de aranceles. Estos motivos provocaron que el IPC tocase mínimos de 2016 a finales del mes de mayo, cuando el descenso anual superaba el 9 por ciento.

Aún así, la renta variable mexicana experimenta un descenso menor al de la brasileña. El índice Bovespa pierde un 6 por ciento en el ejercicio, mientras que el indicador de referencia argentino, Merval, se deja más de un 10 por ciento desde el primero de enero.

Por su parte, el peso llega a la jornada electoral prácticamente plano en su cruce contra el dólar en 2018. Sin embargo, no ha sido un año tranquilo para la divisa mexicana. Desde el primero de enero, los movimientos del peso han oscilado entre subidas del 9 por ciento y descensos superiores al 5 por ciento.

"El candidato puntero lo lleva siendo prácticamente toda la campaña. Entonces yo sí soy de la impresión que el mercado ya descontó con una alta probabilidad que ese equipo sea el que resulte ganador", indicaba Jaime Cortina, director general de Operaciones y Sistemas de pagos de Banco de México según informaba Reuters, sin hacer mención directa a López Obrador.

La depreciación del peso y los vaivenes de la bolsa mexicana "demuestran que su victoria está prácticamente descontada. Aun así, si se confirma su victoria veremos un pico de volatilidad", indica Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank.

A estas alturas, Juan José Fernández-Figares, director de análisis de Link Securities, afirma que "los mercados ya saben que López Obrador va a ganar" y aunque el experto recalca que tanto el candidato como su equipo se han querido mostrar más moderados en lo referente a sus políticas fiscales para tranquilizar a los mercados, "todo va a depender de si la coalición que lidera alcanza o no la mayoría en el parlamento, lo que sí pondría algo nerviosos a los inversores, y, sobre todo, de las primeras medidas que anuncie tras su elección".

El mercado ha descontado hasta cierto punto la victoria de AMLO para el departamento de análisis de Banco Sabadell, aunque "todavía podríamos ver reacciones adicionales", ya que la duda es "con qué mayoría contará y por tanto qué libertad de movimiento tendrá y por supuesto si actuará de forma pragmática o más ideológica".

A pesar de la incertidumbre que puede generar un candidato populista respecto al programa económico del futuro gobierno, Natalia Aguirre, directora de análisis y estrategia de Renta 4 destaca que, "el hecho de estar rodeado de un equipo de asesores que conoce bien los mercados debería limitar estos riesgos". De hecho, el analista de Self Bank recalca que "AMLO es el menos interesado en generar un clima de crispación que pueda desencadenar una crisis económica en el país".

¿Similitudes?

Para Banco Sabadell, "López Obrador es un candidato distinto y por tanto una incógnita y es normal que genere nerviosismo; a los mercados no les gusta la incertidumbre. Sin embargo no tiene porque ser malo, Lula en Brasil suscitó la misma reacción y en ese momento resultó ser lo que necesitaba Brasil".

En enero de 2003, Luiz Inácio Lula da Silva, candidato del Partido de los Trabajadores (PT), llegó a la presidencia de Brasil lo que provocó la inquietud del mundo empresarial y financiero. Su mandato se extendió hasta diciembre de 2010 y durante esos años casi 30 millones de brasileños consiguieron salir del umbral de la pobreza. Sin embargo, sus políticas no solo se centraron en medidas sociales y el país protagonizó grandes avances a nivel económico.

"Habrá que esperar a ver si finalmente López Obrador es un lobo con piel de cordero o si, por el contrario, entiende que en una economía globalizada no puede adoptar medidas que ahuyenten la inversión exterior", concluye el experto de Link Securities.