Bolsa, mercados y cotizaciones
Liberbank solo es atractiva para quien ya era accionista
Cristina García
El fuerte descuento de la operación y el efecto dilutivo que implica quedarse fuera de la ampliación a quien ya tenga sus títulos en cartera invita a suscribirla. Para los no accionistas, Liberbank luce una recomendación de mantener y no de comprar.
Dos semanas será el tiempo que tendrán los inversores para decidir si suscriben o no la ampliación de capital en la que se encuentra inmersa Liberbank con visos de mejorar la calidad y solvencia de su balance por valor de 500 millones de euros. Sus accionistas tendrán hasta el 10 de noviembre para plantearse si respaldan la operación o si, por el contrario, prefieren vender los derechos que les corresponden en el mercado. El efecto dilutivo de no acudir a quien ya tenga acciones del banco y el descuento de la ampliación invitan a suscribirla si se tiene en cuenta que los analistas que cubren la acción aconsejan, ahora, mantener sus títulos en cartera frente a la recomendación que emitían antes de la operación: vender. A pesar de que algunos bancos de inversión, como BBVA, describen a la nueva Liberbank como "a prueba de balas", el mensaje a día de hoy para los no accionistas cambia. Solo cuatro de los trece analistas que cubren al valor recomienda comprar sus títulos según FactSet.
Con el arranque de la operación, los 25.000 inversores particulares que forman parte del accionariado de la entidad vieron el viernes cómo sus títulos se desdoblaban en dos: la acción sin derechos por un lado y, por otro, los derechos que corresponden a cada acción. La primera cerró en los 0,39 euros, mientras que el segundo, que partía de 0,312 euros, acabó en los 0,29 euros. Eso significa que, de sumarse ambos, el valor de mercado de Liberbank alcanzaría los 631 millones de euros en bolsa, a los que habrá que añadir, después, los otros 500 millones que busca ampliar y que representarían casi un 45 por ciento respecto a su capitalización actual. Si la acción se ajusta aún más a la baja en bolsa, acercándose al precio al que los propietarios de los derechos podrán suscribir las nuevas acciones (0,25 euros), la ampliación sería todavía mayor respecto al valor bursátil actual.
Tras concluir la operación, una de las ratios que saldrían fortalecidas, según fuentes próximas a la operación, sería su precio valor en libros, que "ascenderá hasta las 0,44 veces". A día de hoy sus títulos cotizan con un notable descuento respecto a su valor contable: lo hacen a 0,3 veces, es decir, con una rebaja del 70 por ciento. Ningún otro banco cotizado español se negocia tan barato respecto a su valor en libros, lo que explicaría el interés de los cuarenta fondos británicos y norteamericanos, muchos de ellos buitres, por comprar a precio de derribo el 19 por ciento del que se han deshecho las fundaciones bancarias presentes en el capital del banco con la intención de suscribir la operación con el importe obtenido de vender parte de esos derechos. Según fuentes de mercado, ningún fondo supera el 3 por ciento del capital del banco. También tendrá el apoyo de otros accionistas significativos, como el fondo de capital riesgo Oceanwood Capital Management, Corporación Masaveu y DaVinci Capital, que se han comprometido a ejecutar todos sus derechos de suscripción.
Entre los factores de riesgo sobre las que las compañías deben informar a potenciales accionistas, Liberbank señala que futuros aumentos de capital podrían diluir aún más la participación de los accionistas: en 2015 se aprobó "autorizar al consejo de administración para que, dentro del plazo máximo de cinco años, pueda aumentar el capital, en una o varias veces, hasta la mitad del capital social en dicho momento", indica en el folleto, en el que también hace alusión a la prohibición temporal de ventas en corto, que la CNMV estableció en junio y que mantendrá hasta el 30 de noviembre, como máximo, para proteger la operación, recordando que "podría estar afectando a la evolución normal del precio de cotización" y espantando, como explican fuentes de mercado, a fondos menos especulativos que evitan mirar el título por tener capados a los cortos.
Opciones para el inversor
En cualquier caso, los accionistas actuales de Liberbank tienen dos opciones: deshacerse de los derechos vendiéndolos como si fueran una acción o suscribir la ampliación. Por cada acción le corresponde un derecho. Y 19 derechos dan acceso a comprar 41 acciones nuevas por un total de 10,25 euros (a 0,25 euros cada una, lo que implica un descuento del 64 por ciento respecto al precio al que cotizaba la acción el miércoles, el día en el que se anunciaron las condiciones de la operación). De ese modo evitaría el efecto dilutivo que implica la entrada de 1.966 millones de acciones nuevas, que comenzarán a cotizar el 21 de noviembre. En cambio, los no accionistas que deseen incluir a Liberbank en cartera, la mejor opción de entrada es vía derechos y no comprando el título directamente en bolsa porque sale un 3 por ciento más barato a precios del viernes (ver gráfico).
Respecto a los plazos, el aumento de capital podrá cerrarse, como pronto, el 10 de noviembre. Podrá retrasarse si se llega a una segunda vuelta, en el caso de que quedasen acciones nuevas sin suscribir, que empezaría el 16 de noviembre o, incluso, una tercera.
La operación llega en un momento de mercado que dista mucho de ser idílico. A la volatilidad propia de Cataluña se une el retraso en la expectativa de subida de tipos en Europa, con lo que eso significa para Liberbank -que es una de las entidades más sensibles a los tipos-. El banco, que ha marcado sus objetivos bajo el escenario de que no subirán hasta 2021, prevé ser más rentable -con una ROE del 8 por ciento en 2019- y solvente, con la ratio que mide el capital de primera calidad en el 12 por ciento a corto plazo -Moody's mejoró de "estable" a "positiva" la calificación de su deuda a largo plazo-. La entidad se ha comprometido a repartir vía dividendos el capital que supere ese umbral.