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Sexto día de ganancias: el Ibex 35 subió un 0,18% y cerró en los 9.744,7 puntos



    A Change Is Gonna Come. Eso cantaba Sam Cooke, el artista definitivo del soul, en plena lucha por los derechos civiles en los años sesenta. Y al ritmo de su música, una veces angelical y perfecta, otras desenfrenada y festiva y otras melancólica, se ha movido el Ibex 35 en una volátil sesión para subir un 0,18% al cierre que le deja en los 9.744,7 puntos. Ni Europa ni EEUU fueron capaces de subir, por lo que el Ibex nadó a contracorriente.

    Y eso que osciló entre un máximo de 9.883,8 y un mínimo de 9.507,7 después de que se negociaran unos 4.112 millones en todo el parqué. Seguro que Obama también se movió anoche a ritmo de Sam Cooke mientras pensaba en lo que ambos, de raza negra, habían conseguido: gustar a todo el público independientemente de su color de piel.

    "El mercado se ha caracterizado sobre todo por una consolidación de niveles y el buen comportamiento de los grandes bancos y Telefónica, que habían perdido terreno en las últimas semanas. El otro gran factor es la esperada bajada de tipos (del BCE de mañana)" dijo a Reuters Alejandro Varela, gestor de fondos de Renta 4, añadiendo que "el consenso apunta a un recorte de medio punto porcentual".

    "El volumen volvió a ser un tanto decepcionante, aunque la jornada mereció un descenso respecto a la jornada previa en ese sentido. Mucho va a tener que estirarse en las dos jornadas que restan para que a finales de semana podemos hablar de recuperación apoyada por el negocio, porque a este ritmo podría acabar siendo el volumen semanal más bajo de los dos últimos meses", apuntaba desde Bolságora Carlos Doblado.

    "Fue más llamativo el comportamiento del mercado en precios, con un harami en el Eurostoxx 50 y una vela consolidativa para el Ibex 35 que los traders denominan peonza en pleno hueco. Esto refleja transición tras 7 sesiones de registro alcista, algo que no se había visto en mucho tiempo y que es más destacable para los alcistas que el propio movimiento de violento rebote (que era algo de esperar por pura sobreventa y proporcional a la caída en violencia)", añadía.

    "Una jornada alcista mañana podría alargar la recuperación en vertical hasta los 10.300 puntos, pero una apertura bajista con hueco advertiría de que lo más probable sería un ajuste del tramo alcista desplegado desde los 8.000 del Ibex", concluía Doblado.

    BBVA sumó un 1,81%, mientras que Santander repuntó un 0,35% y Telefónica avanzó otro 0,58%. Iberdrola, por su parte, ganó un 0,97%: los blue chips fueron el alma de esta subida a contracorriente. (Un vistazo al Ibex 35, al Eco 10 y al resto del mercado)