Bolsa, mercados y cotizaciones
La debilidad del dólar aleja a Grifols y Meliá de los mejores consejos del Ibex
- Obtienen más de la mitad de sus ingresos en la divisa americana
Javier García Casco
La posibilidad de un retorno a la paridad entre euro y dólar que tanta fuerza ganó en los últimos meses del año pasado parece cada vez más descartada por los analistas. En lo que va de 2017, la divisa comunitaria se revaloriza un 3,2% frente al billete verde. El temor a que el efecto divisa perjudique a aquellas compañías con un negocio más expuesto al otro lado del Atlántico, unido al fuerte rebote con el que han comenzado el año, se ha hecho notar en las últimas semanas sobre las recomendaciones que reciben Meliá y Grifols, que protagonizan los mayores descensos en la clasificación de La Liga Ibex de elEconomista, que combina las recomendaciones de los consensos de analistas recogidos por FactSet y Bloomberg.
Ni siquiera la fuerte revisión al alza que han experimentado las estimaciones de beneficios que manejan los analistas para el próximo trienio ha servido para añadir atractivo a las acciones de dos compañías que se sitúan entre las diez más alcistas del Ibex 35 y que se enfrentan a la amenaza de un euro fuerte. En el caso de Meliá, los expertos prevén que obtenga unas ganancias de 420 millones de euros hasta 2019, un 5,4% más de lo estimado a comienzos de 2017, mientras que para Grifols, los analistas atisban que cosechará 2.265 millones de euros en el mismo periodo, lo que supone una revisión al alza del 7,3% en el año.
Meliá agota su descuento
La cadena hotelera no podía celebrar su regreso al Ibex de mejor manera. Rebota un 21,5% desde su retorno al selectivo en julio de 2016 ?un 25% en 2017?, ha visto cómo los bajistas replegaban velas hasta el punto de que han pasado de controlar casi el 12% de su capital a comienzos de 2016 al 0,49%, y se ha visto beneficiada por el récord histórico de turistas en España.
Además, ha sido el valor de la Liga Ibex de elEconomista que más tiempo ha permanecido en el primer puesto (15 semanas), hasta finales de febrero, una situación que ahora ha dado un giro drástico. Meliá ha perdido en la última semana cuatro posiciones, hasta la octava que ocupa en la actualidad. Nunca antes había ocupado un puesto más bajo en esta clasificación.
Como reconocía su consejero delegado, Gonzalo Escarrer, en una entrevista a elEconomista en octubre del año pasado, "el 57% de los ingresos de la compañía son en dólares", por lo que, de persistir las caídas del billete verde, la hotelera sería una de las firmas más perjudicadas. No en vano, Javier Díaz, analista de Ahorro Corporación, señala que, al tratarse de una compañía "que obtiene más de la mitad de sus ingresos en dólares en países donde sus costes están denominados en divisa local, se ve lastrado por la depreciación del dólar".
Además de por la debilidad del dólar, la compañía se ha visto fuertemente lastrada, precisamente, por haber corrido demasiado en bolsa. Javier Díaz señala que la pasada presentación de resultados de la compañía ha marcado un punto de inflexión. "Sus resultados estuvieron en línea con lo previsto, cuando es una empresa que nos tiene acostumbrados a sorpresas positivas" y añade que las expectativas de crecimiento de la compañía "ya están recogidas en precio". Por su parte, desde Sabadell, que ha deteriorado su consejo sobre la compañía, al pasar de compra a venta, señalan que "tras la revalorización que lleva en el año, el valor ha pasado de cotizar con un descuento del 21% frente a su media histórica a tan sólo un 3,5% en la actualidad".
Grifols deja de ser compra
Esta combinación de ascenso vertical en bolsa anticipando buena parte del crecimiento futuro, unido a la debilidad del dólar, también se repite en Grifols, que vuelve a ser un mantener para los expertos. En Sabadell destacan que el tipo de cambio es "clave" para la farmacéutica, ya que Estados Unidos "representó el 70% de sus ventas en 2016". Según sus estimaciones, una "apreciación del dólar de un 1% eleva su facturación en un 0,7% y el ebitda (resultado bruto de explotación) en un 0,5%", por lo que la compañía ha pasado de ver cómo el efecto divisa no solo no sumará, sino que incluso comenzará a pesar sobre su cuenta de resultados.
Es por ello que, después de que el euro asaltase el nivel de los 1,1 dólares, unido al fuerte rebote del 50,4% que protagoniza desde que a comienzos de diciembre anunciase la compra de la totalidad de Hologic, los analistas consideren que sus acciones deben corregir un 5% para situarse en línea con su precio objetivo. A todo ello se une el alto PER al que cotiza la farmacéutica. Los inversores deberán esperar 23,7 años para recuperar la inversión por la vía de los beneficios, lo que representa una prima del 20% respecto a su media de la última década.