Bolsa, mercados y cotizaciones
El diferencial entre la deuda de España e Italia, en mínimos de 2012
- El riesgo político en Italia reaparece y lleva a su bono a máximos de 2015
- El diferencial entre España y Francia se sitúa en niveles no vistos desde 2010
Arantxa Rubio
La rentabilidad del bono español a diez años se sitúa 63 puntos básicos por debajo del transalpino, lo que supone la brecha más amplia desde marzo del año 2012.
La sombra de una crisis política vuelve a sobrevolar Italia después de que el Tribunal Constitucional tumbara ayer parte de la reforma constitucional planteada por el ex primer ministro italiano Matteo Renzi para dar más estabilidad a su sistema político. Una decisión que, al anular el sistema de dos vueltas y las candidaturas simples, facilita la petición de unas elecciones anticipadas y que no se ha hecho esperar en el mercado. Así, hoy los inversores han huido despavoridos de la renta fija italiana llevando a la rentabilidad de su bono a una década hasta el 2,19%, por encima del 2,11% en el que cerró ayer la sesión. Suponen máximos no vistos desde julio del año 2015.
De este modo, su prima de riesgo, que mide la diferencia con el rendimiento del bund alemán, también ha escalado hasta el nivel de 170 puntos básicos, por encima de los 106 de ayer.
En realidad, este hito se cumple más por ventas indiscriminadas de deuda italiana que por parte de la española, cuyo interés se mantiene cerca del nivel del 1,5%, con la rentabilidad del bono a diez años próxima al 1,54% con el que cerró ayer, y la prima de riesgo en línea con los 107 puntos del cierre de la jornada anterior.
Eso sí, ninguna referencia se salva del rojo, siendo el bono de referencia alemán el que mejor está esquivando las caídas de precio (que suponen subidas de rentabilidad), al mantenerse su interés en el entorno del 0,48%.
El bono francés, por encima del 1%
Los inversores no solo extreman la cautela con la deuda pública de Italia, también con la de Francia, que afronta en abril de este año la primera vuelta de unas elecciones presidenciales cruciales para el futuro del país, con el auge del partido antieuropeo Frente Nacional de Marine Le Pen en el horizonte.
Hoy los inversores han vendido su papel a 10 años, cuyo rendimiento ha escalado hasta máximos de diciembre de 2015 al superar el umbral del 1%, frente al 0,96% en el que se situaba ayer al cierre de la sesión.
Por su parte, el diferencial entre la rentabilidad del bono español y francés se sitúa en niveles de marzo de 2010, en 54 puntos.