Bolsa, mercados y cotizaciones
La renta fija ya es el activo más denostado
- es la mayor preocupación de los gestores, tras la desintegración de la ue
Arantxa Rubio
El soporte de las compras del Banco Central Europeo (BCE), unido al mal comportamiento de las bolsas en lo que va de año, han convertido a la renta fija en el gran refugio de los inversores en 2016. Tanto es así que los fondos de deuda gubernamental en euros cosechan ganancias del 4 por ciento desde enero y los de bonos corporativos del 4,84 por ciento en el mismo plazo. Alzas que se sitúan muy por encima del 1 por ciento de 2015.
Por contextualizar, la rentabilidad del bono español a diez años ha pasado del 1,77 al 1,11 por ciento en el año, provocando ganancias del 11 por ciento en el bolsillo del inversor (una compresión de la rentabilidad implica un aumento de su precio); y la del alemán, del 0,629 al 0,006 por ciento (aunque llegó a estar en negativo hasta octubre, es decir, que los inversores pagaban por refugiarse en papel germano). Así, no es de extrañar que los productos con exposición a la deuda hayan recibido una avalancha de dinero en el año: según los datos de Inverco, acumulan suscripciones netas por valor de 726 millones de euros, de los 1.200 que han entrado en el mismo plazo en la industria.
Pero ojo, el rally tiene sus días contados: gestores y analistas llevan meses alertando de que la renta fija ya no es un activo seguro a estos niveles y de que en un mercado dominado por la actuación del Banco Central Europeo (BCE) cualquier retirada de los estímulos podría provocar un terremoto. Por ahora, el 98 por ciento de estos productos se sitúa todavía en terreno positivo en el año, pero algunos expertos ya empiezan a hablar de burbuja en renta fija.
Según la prestigiosa encuesta que realiza Bank of America Merrill Lynch (BofAML) mensualmente a gestores, éstos ya sitúan como el segundo de los mayores ?riesgos? a tener en cuenta un posible crash del mercado de bonos -el primero es la desintegración de la Unión Europea-. Es más, el porcentaje de gestores que infrapondera en sus carteras la inversión en este activo se sitúa en máximos de los últimos diez meses, hasta el 50 por ciento, cinco puntos porcentuales más que el pasado mes de septiembre.
Qué aconsejan los expertos
La renta fija sigue siendo un reto para los inversores. En ese sentido, muchos expertos empiezan a alertar de que las rentabilidades que se pueden obtener de aquí en adelante empiezan a no compensar las posibles pérdidas que se podrían asumir. Y más teniendo en cuenta que el perfil del ahorrador de renta fija es muy conservador.
"La renta fija ofrece muy poco valor en estos momentos", reconoce Almícar Barrios, analista de inversiones de Tressis, ya que "existe un riesgo asimétrico en las curvas europeas, pues el margen a la baja es mucho mayor que al alza", justifica. El BCE es su driver más importante a corto plazo.
"Con el 40 por ciento del mercado de renta fija sujeto a las compras oficiales del BCE y en un contexto en el que es complicado encontrar bonos de grado de inversión con rentabilidades por encima del 1 por ciento no resulta fácil identificar opciones en Europa", explica Raimundo Martín, director general de Mirabaud AM en España. Por eso, aconseja ser selectivo, aunque reconoce que su preferida es "la deuda emergente". La ausencia de subidas de tipos de interés, la mejora de las materias primas y los precios de la energía son factores de valor añadido.