Bolsa, mercados y cotizaciones

Refugiarse en el bono alemán ya solo renta si invierte a más de 10 años


    Arantxa Rubio, Carlos Jaramillo

    El desplome bursátil que durante el último año ha azotado a las bolsas, sumado a la atonía del mercado para ofrecer soluciones rentables, ha empujado a los inversores a buscar refugio en la deuda pública y, en particular, en la alemana. Tanto es así que sus bonos con vencimiento hasta nueve años cotizan con interés negativo. ¿Esto qué quiere decir? Que el hambre por la deuda soberana es tal que los inversores aceptan pagar dinero por poseer los títulos germanos.

    Su deuda pública ha demostrado ser un activo refugio en el que los inversores se protegen cuando hay algún tipo de tensión. La seguridad cotiza y, en este caso, es el inversor quien paga por ello. Así, cada vez hay más referencias que cotizan en negativo, la última ha sido su bono a 9 años, que ayer cerró en el -0,019% -y lo hizo por primera vez la semana pasada-. Claro que la horquilla se mueve hasta el -0,521% en el caso del papel a 2 y 3 años.

    Así, tan solo la deuda alemana a 10, 15, 20 y 30 años se mantienen en terreno positivo. En el caso del bund a una década, cuyo rendimiento se encuentra actualmente en el 0,11% (se ha desplomado desde el 0,62% de comienzos de año), y ha ofrecido ganancias al inversor que alcanzan el 5 por ciento en lo que va de año. Así, la renta fija germana hasta cuatro años se queda fuera del alcance del BCE, al situarse por debajo de la facilidad de depósito, en el -0,4 por ciento.

    No es el único, Francia, a dos años, pasó la frontera de positivo a negativo a mediados de diciembre, después de que Mario Draghi, presidente del BCE, anunciara más estímulos monetarios, una operación que rebaja aún más sus intereses. Ahora, su deuda cotiza en negativo hasta la referencia a 6 años. Y es que, a más demanda por un bono, aumenta su precio, lo que significa que baja la rentabilidad que el mercado exige por él.

    Es más, los inversores pagan hasta por la referencia a dos años de papel italiano, pero que es el único de la periferia en que lo hacen. En cuanto a España, la rentabilidad que los inversores exigen por comprar sus títulos se halla actualmente en el 1,51%, por debajo del 1,77% en el que comenzó el ejercicio, por lo que aún provoca ganancias del 2 por ciento para el inversor.

    Deuda a 50 años de Francia

    En la jornada de ayer el Tesoro francés anuncio su intención de lanzar emisiones de deuda a 50 y 20 años. De este modo, cuando se produzca -no hay fecha confirmada- será el sexto bono del país galo a 50 años en el mercado. Sin embargo, este no sería el récord de duración de una emisión de deuda. Los gobiernos belga e irlandés tienen bonos cuyo vencimiento llegará 100 años después de que se lanzasen al mercado. Mientras, España colocó en 2014 renta fija a 50 años cuya rentabilidad actual se queda en el 2,7%.