Bolsa, mercados y cotizaciones
El baile corporativo vuelve a encender al sector tabaquero
- Reynolds regresa a máximos tras vender Natural American Spirit a Japan Tobacco por más de 4.440 millones de euros
Daniel Yebra
Japan Tobacco ha vuelto a encender un sector cuyo negocio no acaba de morir por más impedimentos regulatorios que se le interpongan. La tabaquera japonesa que comercializa Winston y Camel fuera de Estados Unidos cerró este martes la adquisición del negocio en el resto del mundo de Santa Fe Natural, filial de Reynolds American que produce Natural American Spirit, marca de tabaco etiquetado como natural y sin aditivos que generó en 2014 unos ingresos superiores a los 130 millones de euros fuera de las fronteras norteamericanas y de 584 millones de euros en total.
Esta operación, que finalmente se ejecutará por algo más de 4.440 millones de euros, refuerza la posición de Japan Tobacco como la compañía más atractiva entre las tabaqueras según las recomendaciones que emite el consenso de mercado que reúne FactSet. Sobre sus acciones, que se han revalorizado más de un 20% en lo que va de año, recae el consejo de "comprar" más sólido del sector pero no el único: también lo reciben la americana Altria y la propia Reynolds, mientras las otras grandes (Philip Morris, British American Tobacco o Imperial Tobacco) se mantienen a un paso de conseguirlo.
Las firmas de inversión esperan que las ventas del sector tabaquero crezcan un 8% en los dos próximos años, destacando el incremento que se estima precisamente para Reynolds, del 46%, y para Japan Tobacco, del 8%. El beneficio neto del sector presenta un ritmo de crecimiento todavía mayor, del 27%, siendo Philip Morris la única que no incrementará sus ganancias entre 2014 y 2016. La mejora más fuerte la protagoniza, de nuevo, Reynolds (un 79%), y después Japan Tobacco (un 30%).
Con la adquisición de Natural American Spirit, la japonesa intenta mantener el ritmo de crecimiento ante la caída de las ventas en su mercado local, donde la población se está reduciendo y, a su vez, está sufriendo un proceso de envejecimiento que repercute en el consumo de tabaco. Mientras, Reynolds se desembaraza en parte de un producto que ha generado polémica en las últimas semanas al haber sido denunciado por la supuesta equiparación de las etiquetas "natural" y "sin aditivos" con "tabaco menos perjudicial" para la salud de los consumidores. De hecho, durante la sesión de este martes, los títulos de Reynolds protagonizaron una subida cercana al 2% en el parqué y recuperaron los máximos anuales y también históricos que alcanzaron a principios de agosto en el entorno de los 44 euros.
Posición financiera
Según las previsiones, Japan Tobacco cuenta actualmente con más de 2.750 millones de dólares en caja, una cifra que antes de anunciarse el cierre de la adquisición de la filial de Reynolds se esperaba que creciera hasta los 5.860 millones de dólares en 2017. Hoy por hoy, es la única tabaquera que cuenta con una posición financiera cómoda, después de las numerosas operaciones corporativas que se han producido en el sector en los últimos años. La deuda de Reynolds asciende a 15.000 millones de dólares, mientras que la de Philip Morris o la de British American Tobacco superan los 20.000 millones de dólares.