Bolsa, mercados y cotizaciones
El Banco de Japón se reúne con el foco puesto en economía global y el crudo
La encuentro de dos días de duración se produce en un momento en el que los inversores japoneses ansían el anuncio de nuevas medidas de estímulo, por parte de la entidad, ante la débil subida de precios actual en el archipiélago.
Los datos del IPC de julio muestran que los precios se mantienen planos por la caída del crudo, lo que ralentiza la meta del BoJ, cuyo programa de compra masiva de activos, activado en 2013, pretende lograr una inflación en torno al 2 por ciento para el próximo año y cerrar así un ciclo deflacionario de casi dos décadas.
Aunque en julio los precios no avanzaron en Japón por primera vez en 25 meses, el banco central japonés mantiene su visión de que la inflación se manifestará una vez se estabilicen los precios del crudo.
Sin embargo, las perspectivas de una inminente subida de tipos en Estados Unidos continúan desviando la inversión del mercado del petróleo hacia las divisas, lo que contribuye a contener un alza en sus precios.
El gobernador del BoJ, Haruhiko Kuroda, ya admitió la pasada semana en la Dieta (Parlamento) que ante esta coyuntura la meta de alcanzar una inflación del 2 por ciento podría retrasarse aún más.
A su vez, el comité de política monetaria analizará el frenazo de China, segunda economía mundial, y las posibles medidas de estímulo que Pekín podría implementar para mantener a flote el crecimiento.
En cualquier caso, el BoJ podría optar en su informe mensual por adoptar una visión más cauta de la economía global ante los efectos que el parón chino puede generar, por ejemplo, en las economías del entorno, reduciendo el flujo de las exportaciones niponas.
En su última junta la entidad mantuvo que "las economías extranjeras continúan recuperándose, aunque aún se aprecia parcialmente un rendimiento debilitado".