Bolsa, mercados y cotizaciones
¿Cuánto daño harán el dólar y el crudo a las compañías de EEUU?
José Luis de Haro
Aunque Alcoa era la encargada la semana pasada de dar el pistoletazo oficial de salida a la temporada de resultados en Estados Unidos, los operadores tienen su atención centrada a la presente semana, donde gigantes como Intel, J.P. Morgan o Wells Fargo presentarán sus cuentas. En esta ocasión, la caída del crudo, alrededor de un 48 por ciento con respecto al mismo periodo del año pasado, y la fortaleza del dólar, cuyo valor ha subido alrededor de un 11 por ciento, son dos de los grandes factores que impactarán de lleno en las cuentas de muchas compañías patrias.
En este sentido, la caída del oro negro tendrá un gran efecto sobre el sector energético, pero de forma muy concentrada. Según Amanda Sneider, analista de Goldman Sachs, las proyecciones de beneficio por acción de las compañías del sector han caído un 47 por ciento en lo que llevamos de año mientras que el impacto sobre las ventas es algo menos severo, con una caída del 20 por ciento. "Las compañías energéticas son más vulnerables a decepcionar del lado de sus ventas", matiza Sneider.
Al mismo tiempo, el fortalecimiento del billete verde pesará sobre las compañías en la que su habilidad de competir se vea mermada por el poderío del dólar. Entre los sectores más sensibles a la volatilidad de las divisas se encuentran el energético, el del consumo básico y el industrial. "Los inversores deben prestar atención al impacto en las transacciones donde las compañías pierden frente a sus competidoras debido a unos precios más altos", estima un informe del banco estadounidense.
Dicho esto, los ingresos de las compañías estadounidenses se benefician del crecimiento económico pese a los vientos en contra que soplan sobre algunas multinacionales. "Aunque los últimos datos apuntan a un primer trimestre bastante débil, la economía estadounidense podría crecer casi un 4 por ciento nominal en comparación con el mismo trimestre de 2014", aseguran desde Goldman.
Aún así, con todos los factores sobre la mesa, desde el banco capitaneado por Lloyd Blankfein esperan que las ventas de las compañías del S&P 500 caigan una media del 3 por ciento con respecto al primer trimestre del año pasado (excluyendo servicios públicos y el sector financiero). Según los cálculos del Goldman Sachs, el impacto de la caída del crudo ha borrado 6 puntos porcentuales de las ventas mientras que la fortaleza del dólar ha contribuido a una caída de 3 puntos porcentuales. Sin embargo, la confianza del consumidor y la buena marcha de la economía estadounidense han contribuido en 4 puntos porcentuales al incremento de las ventas.