Bolsa, mercados y cotizaciones
Soplan vientos favorables para los activos de riesgo
- Las menciones a la recesión en las conferencias se han desplomado un 87%
- El sector tecnológico destaca con las previsiones más optimistas
Samuel Pérez
La actividad en los mercados financieros continúa siendo reducida en pleno mes de agosto. De hecho, gran parte de los inversores y de los agentes que operan en ellos siguen disfrutando de unos merecidos días de descanso. Lo que no se detiene es la agenda macroeconómica. Durante la semana pasada tuvo lugar el simposio de la Reserva Federal en Jackson Hole y, además, se reunieron Trump y Zelensky para acercar posturas con el objetivo de llegar a un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania.
La coyuntura económica sigue siendo compleja: la inflación todavía pesa en el bolsillo de los ciudadanos, los bancos centrales continúan ajustando los tipos de interés en un contexto geopolítico y económico cambiante, y la política arancelaria sigue copando titulares. En este contexto, la incógnita es cómo se están adaptando las compañías cotizadas y si estas están sufriendo el impacto de los factores mencionados. De ahí que la temporada de resultados del segundo trimestre haya ganado importancia dada su correlación con los activos de riesgo.
Las luces
La publicación de las cuentas de las empresas ha dejado como ganadoras a las estadounidenses y, unos pasos por detrás, a las europeas.
En Estados Unidos, con cerca del 90% de las cotizadas habiendo presentado sus resultados, el 81% de estas ha sorprendido positivamente tanto en ventas como en beneficios. Además, el beneficio por acción (BPA) ha crecido un 11,8% respecto al segundo trimestre de 2024, lo que significa que es el tercer trimestre consecutivo con una revalorización de doble dígito.
En Europa, alrededor del 70% de las compañías han hecho públicas sus cuentas, las ventas se han contraído un 2% respecto al segundo trimestre de 2024, mientras que los beneficios han aumentado un 4%. No obstante, estos resultados están marcados por los negocios energéticos y de consumo discrecional que han experimentado una caída de los beneficios del 25% y del 35%, respectivamente.
Las sombras
Las perspectivas de los negocios se encuentran bajo presión. La política arancelaria está dejando huella en los precios, los plazos de entrega y en las cadenas de suministro, lo que ha llevado a varias compañías a recortar sus previsiones para el tercer trimestre. De las 78 empresas que han compartido sus guías de futuro, 38 las han revisado a la baja anticipando menores ingresos, mientras que 40 han optado por lo contrario y esperan mejorar sus resultados.
Los datos no son del todo negativos, aunque al mirarlos con más detalle aparecen ciertas sombras. El sector tecnológico destaca con las previsiones más optimistas de cara al tercer trimestre, mientras que las entidades financieras, las compañías industriales y las ligadas al consumo han mostrado una postura mucho más prudente, ajustando sus perspectivas a la baja en la mayoría de los casos.
La sorpresa
Recesión. La temible palabra volvió a salir a la palestra tras el anuncio de Donald Trump de los anuncios recíprocos. Gran parte de los inversores y de los analistas preveían un impacto significativo de estos en las cuentas de resultados de las empresas, acompañado de un repunte de la inflación.
En este sentido, la sorpresa ha sido evidente. Un estudio de Factset revela que las menciones a la recesión en las conferencias de resultados se han desplomado un 87%. Durante el segundo trimestre el término apareció únicamente en 16 ocasiones, frente a las 124 del primer trimestre. Además, la cifra está muy por debajo de la media de los últimos cinco años (74) y de la última década (61), lo que refleja un cambio notable en la percepción de las compañías.
Las 7 Magníficas
Otra de las grandes preocupaciones de los inversores es la creciente concentración en el S&P 500. Este índice, cada vez más presente en carteras de inversión de todo el mundo, se analiza al detalle para medir su solidez. No son pocos los analistas que ven con inquietud que el sector tecnológico represente cerca del 34% del total y que solo las diez mayores compañías sumen más del 38%. Mucho riesgo en muy pocos valores. Sin embargo, las cifras recientes ayudan a matizar este temor: salvo Nvidia, que aún está pendiente de presentar resultados, el resto de las llamadas "Siete Magníficas" han sorprendido al alza. Las ventas han superado las expectativas en un 3,7% y los beneficios en un 12,25%. Y si se comparan con el segundo trimestre de 2024, el avance es todavía más claro: las ventas crecieron un 12,8% y las ganancias un 22,28%.