Bolsa, mercados y cotizaciones
Wang Ning, el misterioso chino que ya come en la mesa de los más ricos gracias a sus Labubus
- En lo que va de año, Wang acumula unas ganancias de 18.200 millones de dólares
- Labubu se erigió en una de las marcas más deseadas del mundo en la primera mitad del año
- En 2024, las ventas fuera de China continental fueron casi el 40% de los ingresos totales
Alejandro Serrano Martínez
Madrid,
Está llamado a ser uno de los grandes personajes del año. Con una fortuna superior a los 25.000 millones de dólares, este chino de solo 38 años es a día de hoy la octava persona con más ganancias de este año. Y todo gracias a su empresa, Pop Mart, una compañía de juguetes que no para de crecer gracias a un modelo de negocio particular, pero lo que realmente le ha hecho tan famoso a nivel internacional y ha provocado un aumento masivo en su patrimonio es el Labubu, un elfo peludo que ha desatado la locura entre niños y adultos de todo el mundo, donde los consumidores hacen fila frente a las tiendas de Pop Mart para comprar ediciones limitadas de estos muñecos coleccionables.
Hablamos de Wang Ning, el fundador, presidente y director ejecutivo de Pop Mart, que en este 2025 se ha convertido en uno de los fabricantes de juguetes más importantes del mundo. Aunque ha tardado en pegar el pelotazo, este empresario graduado en publicidad sabe lo que quiere y tiene muy claro cuál es su propósito de cara a los próximos años. Fundó la compañía en 2010 y en 2015 lanzó al mercado a su juguete más codiciado. "A lo largo de los años, algunas personas han pensado que somos una empresa nueva que surge de repente, pero en realidad Labubu tiene 10 años, y Pop Mart 15 años. Creo que seguimos siendo una empresa de crecimiento relativamente lento y contenido", confesó en una reciente entrevista en la televisión china (CCTV).
Muchos incluso se preguntan si algún día Pop Mart podría llegar a convertirse en el Disney chino, algo de lo que Wang ahora se desmarca. Está convencido de que, en estos momentos, su empresa debe "forjar su propio camino y aportar algo diferente al mundo" a su manera. Espera que Pop Mart sea en el futuro una compañía con el comportamiento de un "árbol", con unas raíces suficientemente profundas que terminen creciendo a una "velocidad inimaginable", en lugar de terminar siendo una simple "hierba", capaz de crecer rápidamente para luego marchitarse; o como una "flor", con un éxito temporal que no logran mantener.
Wang tiene una participación del 48,73% en Pop Mart, actualmente la empresa número 412 en capitalización de mercado. La progresión de esta firma es imparable, en enero alcanzaba los 15.000 millones y a día de hoy llega a los 54.360 millones y ya casi triplica a Hasbro (11.000 millones) y Mattel (8.750 millones) juntas en capitalización. Esto se ve reflejado en la fortuna de Wang, el décimo chino más rico del mundo. Su fortuna, de 25.900 millones según el índice de multimillonarios de Bloomberg, va ligada a la evolución de la compañía: en el inicio de 2023 era de 1.600 millones; en 2024 pasó a 1.800 millones y en 2025 arrancó en 7.700 millones, lo que hace que en este 2025 haya ganado la friolera de 18.200 millones, siendo la octava persona con mayores ganancias en el año.
Externalización, una de las claves
Sus acciones no paran de revalorizarse y buena muestra de ello fueron los 1.600 millones que se embolsó Wang en un solo día, provocado por el rendimiento bursátil y la popularidad de su empresa, que llevó a su aplicación a encabezar los rankings de descargas. La fiebre por hacerse con estos muñecos impulsó a Pop Mart a convertirse en un día en la app de compras gratuita más descargada en la tienda de Apple en Estados Unidos, según datos de Sensor Tower, una plataforma de análisis e inteligencia de mercado con sede en San Francisco.
Precisamente, California es uno de los ejemplos en los que se pudo demostrar el furor que generan estos adorables muñecos, tal y como publicó una usuaria en TikTok, en donde se veían vídeos de largas y largas filas desde muy temprano, discusión por los turnos y acusaciones contra quienes intentaban colarse. Como si se tratase de una sesión de firmas de los míticos Backstreet Boys, pero en realidad eran los "Juegos del Hambre de Labubu", tal y como describió la propia usuaria. A este boom mediático también se le añade la participación de celebridades que fueron fotografiadas con Labubus en sus manos: desde Rihanna hasta Dua Lipa, pasando por Madonna o Kim Kardashian.
En 2024, las ventas fuera de China continental representaron casi el 40% de los ingresos totales de la empresa, que fueron de 1.794 millones de dólares. La ganancia neta anual fue de 428 millones, registrando un aumento de casi el 200% respecto de 2023. De ese 40% que ahora representa el mercado exterior para Pop Mart, los mayores crecimientos los registró en el continente americano, donde multiplicó su facturación por 12, y en Europa, donde fue 8 veces superior en la comparación interanual. Asia-Pacífico, que aglutina un 20,6% de las ventas, creció un 257,8%.
Este año, según la cuenta de resultados que remitió este 19 de agosto a la bolsa de Hong Kong -donde cotiza-, los beneficios subieron un 396,5 % interanual hasta el equivalente a unos 637 millones de dólares, mientras que la facturación se triplicó (+204,4%) para situarse en unos 1.932 millones de dólares. "Labubu se erigió en una de las marcas más deseadas del mundo en la primera mitad del año", asegura Pop Mart, comprometiéndose a "lanzar diseños superiores" y a impulsar a esa serie de muñecos "a una talla mundial y duradera", según recoge EFE.
Pero, ¿qué es un Labubu?
Los productos de Pop Mart, empresa fundada en Pekín, incluyen figuras de diseño, artículos coleccionables y juguetes, así como colaboraciones entre creadores y grandes marcas que generan un fervor significativo entre coleccionistas y franquicias con cada nuevo lanzamiento. Entre ellas destaca Labubu, un travieso monstruo de orejas puntiagudas y sonrisa diabólica inspirado en la mitología nórdica. Diseñado en 2015 por el artista hongkonés Lung Ka-sing, Pop Mart identificó su potencial y lo agregó a su línea de productos, lanzando las primeras figuras coleccionables en 2019.
Una de los signos que hacen inconfundible a Pop Mart es un modelo de ventas, basado en "cajas sorpresa", donde cada una contiene una figura sorpresa del personaje. Es parecido a jugar a la ruleta: compras la caja, sin saber cuál de los muñecos viene dentro y cuando la abres, te llevas la sorpresa. Si no es el que tú querías, compras otro y así hasta que te toca el gordo. Según palabras del Wang, actualmente, la proporción de su negocio respecto a estas cajas es "menos del 50%". "En el fondo, somos una empresa de propiedad intelectual. Si fuéramos simplemente una empresa de cajas ciegas, no tendríamos que esforzarnos tanto en desarrollar nuestras PI.", aclaró.