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Lagarde sorprende al mercado y da cifras concretas sobre el impacto de los aranceles de Trump en Europa

  • Un golpe de tres décimas en el PIB...
  • ... y una subida de medio punto en la inflación

Álvaro Moreno

Este jueves Christine Lagarde, presidenta del BCE, ha salido a la palestra ante el Comité de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo. La francesa ha sorprendido a propios y extraños arrojando cifras muy concretas de los análisis del BCE sobre el impacto económico de la guerra comercial con Trump y la posibilidad de un euro más débil en el medio plazo debido a esta. "El peso del impacto en el crecimiento económico se concentraría en el primer año después del aumento de aranceles. Concretamente los análisis del BCE hablan de un golpe de 0,3 puntos porcentuales en el PIB de la zona euro". Respecto a la inflación la francesa ha considerado que tanto las medidas de represalia de la UE con sus propios gravámenes como un euro más débil por los aranceles "aumentarían la inflación cerca de 0,5 puntos".

Respecto a cómo impactará esto en los tipos de interés, la francesa ha matizado que esta situación y ese impacto económico genera una gran incertidumbre que le impide comprometerse con una senda concreta. "Especialmente en las condiciones actuales de creciente incertidumbre, seguiremos un enfoque basado en datos y reunión por reunión para determinar la postura adecuada de política monetaria". Sin embargo, expresó su convicción de que "la desinflación va por buen camino".

Al margen de esto también habló, aunque de forma menos concreta de cómo el mayor gasto en Europa en Defensa y en infraestructuras en el caso de Alemania puede contrarrestar los efectos de los aranceles en los precios. "Tendremos que demostrar agilidad y claridad al mismo tiempo", dijo Lagarde sobre la estrategia que implementará el BCE para afrontar los desafíos actuales.

Lagarde también fue preguntada por la potente revalorización del euro, que ya sube un 4% frente al dólar desde principios de mes. La cuestión fue si cree que hay un plan de EEUU para reducir artificialmente el dólar y cambiar el equilibrio financiero global. En ese sentido la francesa comentaba que este proceso "se suma a los argumentos para fortalecer las bases de la región y evitar vulnerabilidades. Desde mi perspectiva, esto implica impulsar rápidamente el euro digital, tanto al por mayor como al por menor, garantizar que tengamos infraestructuras de pago que funcionen bien y profundizar el mercado único para eliminar las barreras comerciales que nos imponemos estúpidamente. En tercer lugar, desarrollar la unión de los mercados de capitales a un ritmo acelerado".

El BCE revisa a la baja el PIB por los aranceles

No solo ha sido Lagarde, sino que el propio BCE ha publicado hoy su boletín económico número 2 de 2025. En el mismo el banco central rivasa a la baja el crecimiento del PIB en 0,2 puntos porcentuales tanto para 2025 como 2026. Según el escrito "el debilitamiento de las perspectivas se debe principalmente a revisiones a la baja de las exportaciones y, en menor medida, de la inversión, lo que refleja un impacto de la incertidumbre más fuerte de lo que se suponía anteriormente".

Lo mismo con la inflación que se revisa dos puntos al alza para 2025. Este alza viene de dos frentes, por un lado "precios más altos de las materias primas energéticas" y por otro "a la depreciación del euro". Este último factor viene debido a "una escalada general de las tensiones comerciales"

También se ha pronunciado este jueves en este sentido otros miembros del BCE, como Madis Muller, miembros del Consejo de Gobierno. "El mercado aún espera que las tasas bajen ligeramente, pero creo que también debemos ser cautelosos", dijo. "Si pensamos en cómo, por ejemplo, los aranceles o contraaranceles impuestos por la UE a los productos estadounidenses podrían afectar la economía, esto debilitaría la economía tanto en Europa como en EEUU pero también probablemente impulsaría los precios ligeramente al alza, por lo que existe un cierto riesgo de reinflación".

¿Quién es quién en la guerra arancelaria EEUU-UE?

Donald Trump ha anunciado una batería de aranceles a productos concretos que afectan a Europa como el aluminio, el acero, los automóviles, productos farmacéuticos y semiconductores. Esto fue en primera instancia hay que añadir importantes gravámenes del 25% a productos agrícolas. Las amenazas han seguido avanzando hasta proponer (aún sin aplicar ni fecha) aranceles del 200% a las bebidas alcohólicas. La UE por su parte ha respondido con unos aranceles propios por valor de 26.000 millones de euros a productos clave que afectan a productos emblemáticos. Destacan los vaqueros, el bourbon, las motocicletas. Estos aranceles podrían ampliarse dado que la Comisión Europea ha abierto una ronda de consulta con los Estados miembros para añadir más bienes.

En cualquier caso una escalada arancelaria tiene un potencial impacto clave en ambas economías. Si bien es cierto que EEUU exporta cerca de 352.000 millones de dólares a Europa y tiene un déficit 213.700 millones con esta, la realidad es el comercio entre ambas es clave. La UE es un suministrador clave de equipo que nutre la industria de EEUU.

Respecto al impacto de los aranceles en la inflación de EEUU hay pocos que duden que hay una relación clara. De hecho desde la Fed estiman que sumarán cerca de un 0,7% a la subyacente ("sin contar precios de la energía y alimentos frescos". Por su parte, según Bloomberg, cuando Trump impuso aranceles en 2018 y 2019, lejos de provocar un auge industrial, la economía se desaceleró. En 2019, el país perdió 43.000 empleos manufactureros, la producción industrial se contrajo y la inversión empresarial se estancó. Además, los ingresos reales de los hogares cayeron por primera vez en cinco años.

Para la UE el intercambio tampoco es ni mucho menos positivos pues importa grandes niveles de gas y GNL estadounidense. Las compras de esta materia prima a su socio al otro lado del Atlántico representan cerca del 19,3% de todas las importaciones de la UE. En cualquier caso, desde Scope Ratings lo tenían claro en su último informe, publicado la semana pasada. En el mismo comentaban que "a pesar de que muchos países europeos y sus principales empresas dependen de EEUU. Para los importadores estadounidenses productos como los bienes de equipo, químicos o medicamentos no pueden sustituirse fácilmente". Por lo tanto, "no hay motivos para el pánico".

Sin embargo, al margen de los propios datos que ha dado este jueves la misma Christine Lagarde el mismo Parlamento Europeo publicaba el mes pasado un informe en el que resumían el fenómeno. "Si EEUU impone aranceles a los productos de las empresas de la UE, estos se encarecerían y, como resultado, se venderían menos . Si la UE reacciona imponiendo aranceles a los productos estadounidenses, estos se encarecerían para los consumidores de la UE". Por su parte, "dado que la economía global está altamente interconectada (aranceles a otros países y la UE) podría interrumpir la cadena de suministro de muchas empresas de la UE, dificultando el abastecimiento de productos específicos a un precio razonable". Según la institución solo la inseguridad respecto a los gravámenes "podría generar que muchos inversores pospongan sus decisiones, frenando el crecimiento económico".