Bolsa, mercados y cotizaciones
Las cotizadas chinas de Wall Street resisten al envite de Trump: Xpeng se dispara más de un 4%
- Alibaba, Baidu, Pinduoduo o NIO son algunos de los títulos más expuestos
- En 2023, EEUU importó cerca de 427.000 millones de dólares en productos chinos...
- ... y exportó al gigante asiático productos por valor de unos 148.000 millones de dólares.
Javier Luengo
La calma que vivieron los inversores tras la jura de Donald Trump el pasado 20 de enero cuando recuperó la presidencia de Estados Unidos y postergó la aplicación de aranceles contra China en el primer día de su mandato se rompió el pasado sábado desde el momento en el republicano dio el primer garrotazo a Pekín anunciando una nueva guerra comercial que el gigante chino ya ha llevado ante la Organización Mundial del Comercio y por la que ha anunciando nuevas "contramedidas" a la "acción errónea" de Washington de aplicar un gravamen adicional del 10% a las importaciones del país asiático.
En concreto, sobre China y sus empresas pesará el nuevo arancel, pero también la exención de tarifas a los envíos de bajo valor, es decir, de menos de 800 dólares que hasta ahora entraba en vigor, una medida dirigida contra Shein y Temu (PDD Holdings) que se han valido de esta norma para evitar encarecer sus productos, algo que ha tenido un efecto negativo sobre gigantes del comercio electrónicos nacionales como Amazon.
Sin embargo, por sectores, el impacto potencial de los aranceles podría amenazar a los costes de las empresas chinas y obligarles, en consecuencia, a reajustar su cadena de suministro para buscar nuevas estrategias de abastecimiento fuera de su país natal donde producen mucho más barato que en otros territorios occidentales. En consecuencia, las acciones chinas cotizadas en Wall Street a través de la fórmula del ADR y ligadas al sector del consumo somo Alibaba, JD.com han caído este lunes durante unos instantes tras los anuncios de Trump del pasado fin de semana para luego darse la vuelta y llegar a repuntar hasta un 2,4% en el caso de Alibaba -el 'Amazon' chino- mientras que JD.com se ha mantenido estable.
Al tiempo, tecnológicas de la talla de Baidu, NetEase, Tencent y Bilibili han tenido un comportamiento dispar ante el miedo de los vientos en contra indirectos que puedan tener que aguantar como consecuencia de esta nueva política comercial estadounidense como pudieran ser los mayores costes de hardware o represalias hacia el Ejecutivo chino. En el caso del reconocido como 'Google chino' [Baidu] la caída ha sido superior al 1% mientras que Tencent ha aguantado con un repunte cercano al punto porcentual y Bilibili ha hecho lo propio en el entorno del 2,2%.
El gran perjudicado: la automoción
Pero, si existe un sector especialmente expuesto a los nuevos aranceles es el de la automoción y los fabricantes chinos -detonantes del nuevo orden mundial en el motor- no se libraron del escepticismo de los inversores. Li Auto, Nio cayeron algo más de un 2%, a la par que el resto del sector, ante el miedo de que sus exportaciones a EEUU sean cada vez menos competitivas. Mientras tanto, Xpeng lideró las ganancias dentro de las chinas cotizadas de Wall Street con un avance superior al 4%.
A pesar de que muchos creen que China está ahora mejor preparada que en 2018 cuando recibió el golpe comercial de la primera administración de Trump, la realidad es que el tráfico de mercancías entre las dos potencias económicas del planeta es uno de los más intensos del planeta. Durante 2023, la economía estadounidense importó cerca de 427.000 millones de dólares en productos chinos y exportó al gigante asiático productos por valor de unos 148.000 millones de dólares. Bien es verdad que a pesar de que la mayoría de las barreras comerciales impuestas durante el primer Gobierno de Trump siguen hoy vigentes, Pekín dice haber conseguido aumentar la autosuficiencia en sectores clave de la economía actual como la tecnología -el caso de DeepSeek es la última muestra- o las energías renovables.
El presidente chino, Xi Jinping, ya dejó clara la postura a adoptar por su economía cuando fue reelegido como presidente del Partido Comunista en 2022 al pedir a sus empresas "espíritu de lucha". Una posición que, ahora y visto el frente abierto por la Casa Blanca, podrían necesitar más que nunca.