Bolsa, mercados y cotizaciones
La gran banca privada renuncia a rebajar los fondos de capital riesgo a 10.000 euros
- CaixaBank, Santander y Sabadell Urquijo abogan por mantener el umbral en los 100.000 euros
- BBVA se muestra partidario de facilitar la entrada a inversores desde 50.000 euros
Ángel Alonso
Madrid,
Las grandes firmas de banca privada españolas no se plantean rebajar el mínimo de acceso a fondos de mercados privados a 10.000 euros, pese al cambio normativo que lo permite para clientes minoristas siempre que sea bajo asesoramiento y la cantidad invertida no represente más del 10% de su patrimonio financiero. Así lo pusieron de manifiesto los directivos de las principales entidades que han participado en MIND 2023, evento organizado por la consultora Épika en Madrid, que ha congregado a casi un millar de asistentes relacionados con el mundo de la inversión.
Ni CaixaBank ni Santander ni Sabadell Urquijo van a reducir el punto de entrada de 100.000 euros que permite ahora la regulación para los productos alternativos, lo que algunos denominan la democratización de la inversión y que antes de que el año pasado los bancos centrales emprendieran la mayor subida de tipos de interés en décadas se observaba como una forma de obtener cierta revalorización de las carteras cuando con los activos de renta fija apenas se podía arañar rendimiento sin riesgo.
Para Víctor Manuel Allende, director de banca privada de CaixaBank, sería "masificar" un vehículo que por su iliquidez debe ser solamente para grandes patrimonios, de manera que todos los clientes obtengan la misma rentabilidad en su fecha de vencimiento. "La mejor manera de preservarlo es tener tickets elevados. Existe una burbuja desde el punto de vista de la oferta tremenda, y más de una firma va a tener algún problema con los productos alternativos, no me cabe ninguna duda. Yo abogaría por que se incorporen a las carteras con sentido común", indicó.
A su juicio, "la industria viene de un proceso histórico de colocación de productos y tenemos que transformarlo en otro que sea de construcción de carteras con productos alternativos. Pero hay que trabajar mucho la definición de cuáles son los públicos objetivos", subrayó.
Adela Martín, directora de banca privada, gestión de activos y seguros de Banco Santander en España, incidió en que, pese a que no le parece mal flexibilizar el límite a 10.000 euros, en la entidad no lo van a rebajar. Y en la misma línea se expresó Xavier Blanquet, director de negocio de Sabadell Urquijo Banca Privada. "A los clientes de banca privada con menor patrimonio intentamos ofrecerles productos alternativos que estén diversificados, y a los segmentos más elevados les ofrecemos estrategias concretas, pero sin que sea una colección de cromos, sino una cartera construida con sentido", comentó.
BBVA fue la única entidad que expresó su intención de rebajar el mínimo de acceso pero a 50.000 euros porque "permite ofrecerlo a más clientes, aunque siempre en el ámbito de la banca privada" y señaló que se debe avanzar en la arquitectura abierta en este tipo de productos, con estrategias y añadas distintas para diversificar las carteras con visión de largo plazo.
Dentro de las grandes entidades la única que ha apostado desde el principio por facilitar el acceso de sus clientes de banca privada de menor patrimonio ha sido Bankinter, que ha lanzado un fondo de fondos con una clase específica para este tipo de clientes, aprovechando las diversas estrategias en las que coinvierte el banco. MyInvestor también se ha asociado con Arcano para el lanzamiento de un vehículo invertible desde 10.000 euros, con los condicionantes que impone la normativa.
Respecto a la evolución del negocio de banca privada, que este año ha sido especialmente bueno, según sus responsables, gracias a la normalización de tipos de interés y el regreso de los perfiles de riesgo naturales, Allende advirtió de que la segmentación de los clientes por volumen patrimonial se ha convertido en un concepto caduco. "La industria de inversión tiene que moverse hacia los clientes que necesiten verdaderamente una intensidad de la gestión patrimonial elevada, y esto no tiene nada que ver con los clientes de más de 500.000 euros", explicó.
Además, se mostró partidario de los nuevos aires que podría traer la Retail Investment Strategy, directiva europea más focalizada en el asesoramiento que en la mera distribución de productos que se encuentra en fase de discusión. "Tenemos que dar mucho más valor en el asesoramiento del que damos ahora. Las bancas privadas tienen que diferenciarse internamente son subsegmentaciones y avanzar en el pago explícito", subrayó,