Adyen lidera las caídas en Europa con un 50% de corrección en el año

Los titulares que protagoniza desde el mes de agosto Adyen, la compañía de pagos holandesa que permite que empresas acepten pagos electrónicos y da servicio a gigantes como Meta Platforms, Microsoft y Netflix, no son precisamente positivos, ya que acumula pérdidas del 58% desde entonces, que la dejan con una corrección anual de casi el 50% y es el valor más bajista del EuroStoxx 50.

La firma, que no parecía encontrar suelo desde este verano, ve sus títulos en los 672 euros, desde los 1.648 euros que llegó a alcanzar el 31 de julio. Este desplome llegaba después de la presentación de resultados del primer semestre del año, con unos ingresos de 739,1 millones de euros (21% de crecimiento interanual) y un ebitda de 320 millones de euros, que se quedaron por debajo de las previsiones del mercado.

De hecho, el consenso de mercado considera ahora que cerrará el 2023 con un beneficio bruto de explotación de 708 millones de euros, un 4% por debajo del ejercicio pasado. Tras este batacazo en bolsa, Adyen anunciaba en una conferencia que "su visión de crecimiento no estaba siendo entendida por el mercado" y que planea celebrar un día del inversor en noviembre.

En el mismo periodo, firmas como Stifel rebajaron la calificación del procesador de pagos holandés de comprar a mantener, y ejecutó un recorte del 60% en su precio objetivo (a 720 euros desde 1.900 euros), por "falta de catalizadores positivos en los próximos doce meses", tal y como recogen desde Bloomberg. "Adyen se enfrenta al dilema de un sector de pagos en desaceleración, una competencia más agresiva -especialmente en Estados Unidos- y la necesidad de contratar personal para crecer. Seguimos siendo positivo sobre la oportunidad de Adyen a largo plazo, y espera que sea una historia de éxito en la industria de pagos, pero ve el riesgo de uno o dos semestres malos más", indican desde la firma, que señalan a Worldline como su opción preferida en el sector.

Con todo, tras más de un mes en rojo, el precio de la acción de Adyen logró contener las caídas el pasado miércoles en el que consiguió rebotar un 3% después de que Barclays mejorara su recomendación de mantener a comprar, pese a que también ejecuta un recorte del 21% en la valoración (el nuevo precio objetivo es de 900 euros). "Es probable que las cosas empeoren en el segundo semestre antes de mejorar, pero tiene que haber un precio al que uno debería mirar a través de esto y comprar", indica a este hilo Sarah Jacob, analista de Bloomberg.

Así, el mercado espera que Adyen remonte, aunque no próximamente, en cifras, las ganancias netas que se estimaban para el conjunto de 2023 para Adyen sufren un tijeretazo del 1,2% en tan sólo el mes de agosto. Igual sucede con su recomendación (mantener), y levanta el peor consejo desde agosto de 2021.