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Cómo nadar entre fondos tiburones: vehículos de renta fija de más riesgo


    Víctor Blanco Moro
    Madrid ,

    En los primeros 40 días del año el mercado de renta fija parece querer convencer a los inversores de que este ejercicio no va a ser como el pasado, que dejó las pérdidas más abultadas en deuda que se han visto en décadas. Lo normal, según los principales índices de deuda del mercado, es que se consigan ganancias en los primeros compases del año;de media, el índice de renta fija mundial de Bloomberg, que recoge todo tipo de bonos, de todas las calificaciones, sube un 2,46%. Y, si se analiza el comportamiento de las distintas categorías de renta fija en este periodo, es la deuda de más riesgo, denostada por muchos analistas e inversores, la que está dejando los mejores resultados.

    La categoría de deuda con la que más se gana en el año, si se tienen en cuenta los grandes índices, es el high yield, bonos que no cuentan con la calificación de grado de inversión por parte de las agencias, y que entrañan más riesgo de impago que otro tipo de bonos con mejor nota. Las ganancias anuales que se consiguen con el índice, a cierre de la sesión del jueves, son del 4%. Por detrás de este tipo de bonos, pero también mejorando el comportamiento medio de la renta fija en el año, se encuentra la deuda de mercados emergentes, con una subida del selectivo que recoge Bloomberg del 2,53%.

    Estos buenos resultados de la deuda de más riesgo puede haber llevado a algunos inversores a considerar incrementar su exposición a estas categorías de deuda. Además, para inversores con un perfil más agresivo, dispuestos a asumir más riesgo en renta fija en lugar de quedarse en la deuda más segura a cambio de menos rentabilidad, estos bonos pueden ser una buena alternativa si se está dudando en entrar en renta variable en este momento.

    Así, ahora es interesante conoce qué fondos de deuda de alto riesgo, ya sea high yield o emergente, están dando los mejores resultados este año a los inversores españoles. Para quien quiera ahora lanzarse a la piscina y nadar entre tiburones estos vehículos pueden ser una buena idea para añadir algo de riesgo a su cartera de renta fija.

    El atractivo de la deuda emergente

    El índice de bonos de mercados emergentes que recoge Bloomberg cuenta ahora con una rentabilidad a vencimiento del 7,1%, después de dejar ganancias por precio del 2,8% en lo que va de año. Se trata de un mercado amplio, en el que los inversores pueden perderse a la hora de elegir dónde invertir, pero, a la vez, exige ser muy selectivo, por el alto riesgo que puede tener entrar en un bono que no sea adecuado.

    Alejando Arévalo, responsable de deuda de mercados emergentes de Jupiter AM, explica porqué este momento es interesante para incrementar la exposición a este tipo de bonos. "El año pasado la Reserva Federal empezó a subir tipos de forma agresiva, China no creció y empezó una guerra inesperada... en 2023 muchas cosas han cambiado. China está en un proceso de reapertura, y en EEUU hay una economía con un límite en la subida de tipos de interés, y eso hace que la preocupación que vimos el año pasado ya no esté tan presente", explica.

    Ahora, en este contexto más positivo para la renta fija, las valoraciones son atractivas como para entrar. "Si miras los diferenciales, y dónde se encuentran en este momento, son ahora similares a los que había cuando se produjo el shock de las materias primas en 2015, cuando el petróleo cotizaba a 40 dólares el barril. El año pasado no hubo ninguna diferenciación cuando los inversores salieron del mercado; vendieron todo, con salidas parecidas a las de 2008. Ahora las valoraciones están totalmente desequilibradas. Y ahora los inversores están regresando, otro factor que hace que este tipo de activos sea interesante", explica Arévalo.

    Rafael Valera, CEO y gestor de Buy & Hold, coincide también al percibir un fuerte interés por parte de los inversores en renta fija: "El 90% del dinero que está entrando en nuestros fondos es en renta fija, aproximadamente, y nunca habíamos tenido tantas entradas como en este año", señala.

    Arévalo destaca las regiones en las que se están centrando en este momento; el incremento de exposición que han hecho en los fondos de la gestora está orientado hacia Asia: "Nuestra sobreponderación más grande sigue siendo Latinoamérica", explica, "pero el cambio más significativo que estamos teniendo ha sido aumentar la exposición a Asia, y no necesariamente a China, si no a países que se están beneficiando de la reapertura, como Tailandia, Vietnam, Hong-Kong y Corea", explica el experto.

    En 2023, los 10 fondos de renta fija emergente a la venta en España que más suben se revalorizan entre el 16,7% que consigue MS INVF Emerging Markets Debt y el 5,8% del EdRF Emerging Bonds, con datos de Morningstar a cierre del jueves. De media, los 10 fondos mantienen ahora una rentabilidad a vencimiento del 6% (se han tenido en cuenta los fondos a la venta en España y con inversión mínima de 5.000 euros como máximo). Si se tiene en cuenta un periodo más largo, los resultados no son positivos, ya que, de los 5 fondos de esta lista que tienen historial a 3 años, sólo dos se revalorizan, mientras los otros tres acumulan pérdidas anualizadas de doble dígito.

    El 'high yield' bate a la inflación

    La categoría de deuda de alto riesgo por excelencia, el high yield, lidera las subidas en 2023, algo que no le impide seguir manteniendo la rentabilidad a vencimiento más elevada del mercado: un 8,6%. Este dato es ahora muy significativo, teniendo en cuenta que se mantiene por encima de las tasas de inflación que se están dando en Europa en la actualidad, del 8,5%. Si se tienen en cuenta las expectativas de inflación de largo plazo, desde octubre llevan moviéndose entre el 2,2% y el 2,4% en Europa para el periodo de 5 años que empieza en 2028.

    Así, con una rentabilidad real positiva en este tipo de bonos, el gran riesgo para los inversores a la hora de invertir en este tipo de títulos es el riesgo de impago. Si una empresa quiebra, el bonista puede perder toda su inversión, algo que, sin embargo, no se produce en la mayor parte de casos, ni siquiera en los momentos de más tensión para los mercados, como la Gran Crisis Financiera. Entonces, en el peor momento del año 2009, la tasa de impago media de la deuda high yield fue del entorno del 13%, mientras que en la crisis de las puntocom, en el año 2002, no llegó a alcanzar el 10%.

    En el universo de los bonos sin grado de inversión se encuentra uno de los tipos de deuda que más han gustado a los inversores en los últimos años: la deuda subordinada de los bancos. "El universo de deuda subordinada bancaria es high yield en su mayoría. Ibercaja es un buen ejemplo, emitiendo hace un par de semanas deuda perpetua en niveles de más del 8% de rentabilidad. Es un banco con muy buena salud, pagando esas rentabilidades y con un rating de B1 para Moody's", explica Rafael Valera. "Cajamar, que es un 9% de nuestra cartera, te está pagando un 9% a 2026, y tiene una calificación de B para S&P", destaca el gestor.

    Aunque la categoría de deuda high yield se comporta mejor que la de emergente desde el primer día el ejercicio, no ocurre los mismo en los fondos de deuda sin grado de inversión a la venta en España. Los 10 mejores del año se mueven en una horquilla de rentabilidades de entre el 5,2%, la subida que consigue el que mejor lo hace, Greenside Global High Yield Bd A EUR Acc, y el 4,25% que consigue BlueBay Global Hi Yld ESG Bd M EUR, el décimo que consigue mejores resultados. El cupón medio de los 10 fondos es ahora del 6,28%.