Bolsa, mercados y cotizaciones
El año 2023 podría favorecer a las bolsas emergentes, según Robeco
- Los rendimientos de las principales clases de activos mejorarán el próximo año
- La gestora estima unos descensos del beneficio por acción del 20%-30%
María Domínguez, Enrique Boyero
El año 2023 podría ser especialmente bueno para la renta variable emergente, excluida la de China, de acuerdo con las previsiones de Robeco. Estos mercados suelen batir a sus homólogos desarrollados en un mercado de dólar bajista, pero, además, "la fase bajista del ciclo de beneficios en estos mercados está más madura", han explicado los expertos del banco durante su presentación de perspectivas en la mañana de este jueves. El motivo es que "sus bancos centrales se han adelantado a los bancos centrales de mercados desarrollados en la lucha contra la inflación".
En el marco de un evento realizado a través de Internet, los expertos de la entidad han destacado que la última etapa de una prolongada subida de tipos "conlleva sufrimiento a corto plazo, conforme el agotamiento y la desesperación se afianzan por todo el espectro multiactivos".
Colin Graham, director de soluciones de inversión multiactivos de Robeco, ha advertido: "Consideramos errónea la creencia de que los bancos centrales van a poder evitar una recesión cíclica y conseguir un aterrizaje suave en 2023. De hecho, prevemos un aterrizaje duro. Por otro lado, las recesiones suelen ser muy desinflacionarias y pensamos que ello reconducirá la inflación. En última instancia, 2023 servirá para mejorar significativamente los rendimientos de las principales clases de activos, una vez que se hayan alcanzado los tres máximos de la inflación, los tipos y el dólar".
Los expertos de la gestora considera que a mediados de 2023 empezarán a presentarse "buenas oportunidades de entrada en renta fija, para tomar posiciones largas". Esto sucederá una vez que el desempleo suba hacia el 5% y la desinflación se acelere.
Por otro lado, la firma prevé que, en 2023, los beneficios por acción (BPA) caigan un 20%-30%, lo que hará que la valoración del high yield sea más interesante que la de la renta variable.
Robeco pronostica que las estrategias de inversión sostenible volverán a crecer en 2023 en activos bajo gestión, y lo harán más rápido que los activos tradicionales, ya que los inversores siguen interesados en solucionar los distintos retos a los que se enfrenta la humanidad, especialmente el cambio climático, la crisis del coste de la vida y la desigualdad de ingresos.En palabras de Rachel Whittaker, responsable de análisis de Inversión Sostenible de Robeco, el motivo de ello es que ya "puede demostrase que la inclusión de consideraciones ASG [ambientales, sociales y de gobierno corporativo] junto al análisis financiero beneficia a los rendimientos financieros a largo plazo, por ejemplo, al reducir los riesgos sociales o ambientales previstos, o detectar nuevas oportunidades de crecimiento. Además, la mayor concienciación social ante los retos de la sostenibilidad se traduce a un mayor número de inversores que adecúan las carteras a sus valores". Al mismo tiempo, la creciente gama de estrategias sostenibles existentes hace posible que haya más inversores que puedan simultanear objetivos sostenibles y financieros, ha añadido.