Bolsa, mercados y cotizaciones
Los máximos de la prima de riesgo cumplen 10 años
Víctor Blanco Moro
Madrid ,
Este domingo se cumplen 10 años de uno de los momentos más tensos que se han vivido desde la configuración de la Unión Europea. El 24 de julio de 2012 los bonos de los países de la periferia europea, y las primas de riesgo de estos países (España, Italia, Portugal y Grecia), tocaban niveles máximos hasta la fecha, y que todavía son inéditos a día de hoy.
En el caso del bono español, la rentabilidad que se llegó a tocar entonces fue del 7,56%, con la prima de riesgo llegando a superar los 638 puntos esa jornada. Con la ventaja que ofrece analizar los hechos históricos con perspectiva, ahora puede parecer que la situación no llegó a ser tan tensa como se pueda pensar, pero la realidad es que la crisis llegó a tornarse dramática en Europa.
Los hombres de negro escrutaban a los países más endeudados de la eurozona, necesitados de una ayuda financiera que terminó tornándose en rescates y la continuidad de la Unión Monetaria se llegó a poner en entredicho.
España se encontraba en un momento de cambios y se tuvo que dar un vuelco en varios frentes para reducir el impacto de la crisis, como la banca, con la creación de un banco malo y la imposición de recortes en el gasto público. Sin embargo, si hubo un actor protagonista a la hora de estabilizar la economía de la eurozona y generar tranquilidad en los inversores y los mercados, ese fue el Banco Central Europeo (BCE), con Mario Draghi al frente de la institución desde finales de 2011. La estabilidad que se ha conseguido en los mercados de deuda europeos con el paso de los años está directamente relacionada con la aparición del BCE como el principal elemento para afianzar la tensa situación que se atravesaba entonces.
Un escenario muy diferente
"Tras ese momento de máxima tensión la prima de riesgo ha ido disminuyendo. Desde entonces se ha encaminado a la baja hacia niveles mínimos que se han producido entre 2018 y 2022. Estos cuatro años se ha movido entre 60 y 120 puntos básicos, con una media de 85 puntos. Ese era un nivel que resultaba muy cómodo para los gobiernos", recuerda Hernán Cortés, socio de Olea Gestión y cogestor del fondo Olea Neutral.
¿Cómo se ha conseguido domar las primas de riesgo? Ahora que la inflación ha vuelto con especial fuerza, y los bancos centrales están empezando a endurecer su política monetaria, este indicador de riesgo país se está manteniendo relativamente tranquilo, en el entorno de los 122 puntos. El bono español cotiza 5,3 puntos porcentuales por debajo de los máximos de 2012, ahora en el 2,25%.
La crisis actual no ha llegado a alcanzar la magnitud de hace una década, y en eso Europa, y en concreto, el BCE, tiene mucha culpa. Una de las grandes diferencias que hay entre ahora y 2012 es la percepción por parte de los inversores de que el BCE va a estar siempre ahí, sosteniendo a los países más débiles de la zona euro cuando se le necesite.
El último anuncio de Christine Lagarde es buena prueba de ello: el Mecanismo de Protección de Transmisión (TPI, por sus siglas en inglés), es una herramienta diseñada para evitar tensiones excesivas en las primas de riesgo. Eso sí, con ciertas exigencias para implementarse, y casi todas pasan por mantener un control que evite entrar en una situación de deuda insostenible.
Otra de las principales herramientas que han ayudado a blindar las primas de riesgo de los países más vulnerables de la eurozona se aprobó por la crisis del Covid-19: la mutualización de la deuda europea, con la emisión, por primera vez en la historia, de bonos del conjunto de la eurozona. Es una medida que sin duda ha contribuido a esterilizar las primas de riesgo, al compartir los riesgos entre los distintos países de la eurozona.
Pero no todo ha sido un camino de rosas, ni parece que lo vaya a ser. Muchos analistas hacen hincapié en las vulnerabilidades que presenta Europa, donde el limite de déficit se ha tenido que poner en pausa durante unos años por la llegada del Covid-19, pero que todavía tiene que lidiar, sobre todo en la periferia, con altos niveles de deuda pública, sin poder contar, como sí hace EEUU, con la divisa de reserva mundial.
De hecho, si bien las primas de riesgo y los bonos dan señales de mucha más tranquilidad en comparación con lo que ocurrió en 2012, no es el caso del euro. Hace una década cotizaba cerca de 1,47 dólares, y ahora lo hace en los 1,02, y ha llegado a la paridad este mes de julio.