Bolsa, mercados y cotizaciones
El inversor de EEUU sale a la compra de deuda europea en negativo
- Los extranjeros han adquirido 118.000 millones de deuda soberana en euros
- Se benefician de la rentabilidad que les da el cubrir la divisa
Carlos Jaramillo
Uno de los grandes temas en mercado en 2019 es la ingente cantidad de deuda que hay a nivel global con rentabilidades negativas. Una de las grandes preguntas que ha surgido es quién compra estos bonos -aparte de los bancos centrales- con la promesa de recibir menos dinero del prestado al vencimiento y la respuesta está en los inversores extranjeros.
Según los datos del BCE recogidos por JP Morgan, estos han comprado 210.000 millones de dólares (190.000 millones de euros) en la primera mitad del año de los cuales 130.000 millones de dólares (118.000 millones de euros) corresponderían a deuda soberana.
"Esta significativa entrada de dinero destaca particularmente en contraste con lo sucedido en marzo de 2015, cuando el BCE empezó su QE y salieron 550.000 millones de dólares. Aunque no se puede cuantificar claramente qué porcentaje procede de Estados Unidos creemos que es una parte sustancial", resaltan los analistas de la entidad norteamericana.
A pesar de que a simple vista gran parte de la renta fija soberana de la eurozona ofrece rentabilidades negativas, lo cierto es que al cubrir la divisa el inversor en dólares obtiene un retorno positivo que en algunos casos incluso supera el que consigue con el bono americano a 10 años. "Los inversores extranjeros pueden encontrar que la deuda con rentabilidad negativa de Europa o japonesa es atractiva, ya que pueden aprovecharse de la cobertura de la divisa y del diferencial de tipos", explican en la entidad.
Según la herramienta de Bloomberg, cubriendo la divisa el bono alemán a 10 años daría un rendimiento del 1,54% en dólares, solo 23 puntos básicos menos que el dólar. Mientras, la del francés se situaría en el 1,87% y la del español en el 2,38%. Por contra, aquel europeo que comprase un bono de EEUU y quisiese cubrir la moneda obtendría un rendimiento negativo de 29 puntos básicos.
De dónde llega el diferencial
La mayor parte de esta brecha se explica por el diferencial entre el tipo de interés de la divisa del inversor y de la del activo que se quiere cubrir. "Un inversor en dólares que ejecuta una cobertura de divisa con un contrato de futuros recibirá el activo libre de riesgo en dólares [el bono americano] y pagará el activo libre de riesgo en euros [el bono alemán]", explican desde Wells Fargo AM. "En la práctica esto implica que, con un contrato de divisas a futuro, si el interés del activo libre de riesgo de la divisa del inversor es más elevado que el de la moneda del activo, el primero ganará unos retornos más altos que aquel que invierta en la moneda del activo", concluyen desde la entidad.
A esto habría que añadirle el retorno extra que se obtendría por el margen denominado cross currency basis (CCB, por sus siglas en inglés). "Esta ratio es una medida de la escasez de dólares en mercado, cuando [este índice] esté más en negativo mayor será la escasez. Así, para los inversores en dólares estadounidenses, que el CCB esté en negativo puede beneficiarles al cubrir su exposición a divisa", inciden desde M&G. Según los datos recopilados por Bloomberg, este margen está en los -20 puntos básicos frente al euro, lo que para un norteamericano implica otro extra de 20 puntos básicos en su rentabilidad.
Aquel inversor de la eurozona que esté dispuesto a tener dólares en cartera también podría lograr rentabilidades positivas invirtiendo en deuda en euros siguiendo esta misma táctica. "Aquellos que estén cómodos con exposición al dólar, deberían considerar tener deuda en euros intercambiada en dólares como parte de su cartera de renta fija (...) Usando forwards a 3 meses, en dólares el inversor obtendría una rentabilidad del 2,9% con la deuda corporativa de la región", explican desde el equipo de UBS.
Uno de los grandes perjudicados por la caída de los rendimientos de la deuda es el sector asegurador, que ahora tiene prácticamente imposible lograr sustituir las rentabilidades de los bonos que tiene en cartera. El consejero delegado de Allianz y el CFO de Talanx han indicado en entrevistas a medios alemanes que el 'bund' no es una inversión viable en este momento y el economista jefe de la asociación alemana de aseguradoras indicó que "difícilmente alguna aseguradora alemana está comprando bonos del país".