Bolsa, mercados y cotizaciones

Con la deuda global se se ha perdido más de un 1% en dos semanas


    Víctor Blanco Moro

    Septiembre puede haber sido el mes que marque el antes y el después en el mercado de renta fija en los últimos años. La bacanal que se ha vivido en el mercado de deuda en 2019, con el inversor conservador ganando más de un 4% en un año en el que no había buenas expectativas para este tipo de activos cuando comenzó, ha dejado la duda entre muchos inversores, que se preguntan si existe una burbuja en el mercado de deuda. A finales de agosto, el día 29, el dinero invertido en deuda con rentabilidades negativas, en los índices de deuda de Bloomberg, marcó un nuevo récord por encima de los 17 billones de dólares, lo que terminó de convencer a muchos expertos para hablar abiertamente de una burbuja en el mercado de renta fija.

    Sin embargo, algo parece haber cambiado desde entonces, ya que casi 2,5 billones de dólares de esos 17 billones han vuelto a ofrecer rentabilidades positivas. Así, parece que algo ha variado en la disposición de los inversores durante el mes de septiembre: desde que arrancó este periodo el índice de deuda global pierde más de un 1,1% y sólo unas pocas categorías de renta fija han conseguido subir durante el mes. De las 20 más importantes, sólo la deuda high yield, tanto en Europa, Estados Unidos, como de forma global, acumula subidas en precio. También lo hace el mercado de bonos emergentes en dólares, y la deuda china. El resto de categorías está retrocediendo. Eso sí, las expectativas de rentabilidad, en el peor de los casos, siguen por los suelos, en el 0% para la deuda europea, y el 1,32% para el agregado de deuda global. Con esa perspectiva, teniendo en cuenta las comisiones, el inversor minoritario no tiene nada que rascar.

    El impacto del nuevo plan del BCE

    Esta semana todos los ojos estaban puestos en la reunión del Banco Central Europeo (BCE). Las expectativas eran muy altas en esta ocasión: el recorte del BCE ha sido de 10 puntos básicos, cuando se llegó a descontar que alcanzaría los 20 puntos básicos y el programa de deuda, aunque no tiene un final establecido, es menor de lo que se esperaba, de 20.000 millones mensuales.

    La renta fija soberana de los grandes países de la zona euro ha reaccionado ante las últimas decisiones del BCE con caídas en precio: con la excepción de Italia, la deuda alemana, francesa, española y portuguesa han caído en las últimas dos jornadas. Enrique Lluva, subdirector de renta fija de Imantia, considera especialmente importante una medida que también adoptó ayer el organismo que dirige Mario Draghi: "Ayer aparece un nuevo jugador en la baraja de formación de precios: la facilidad de depósito escalonada [el interés que el BCE cobra a los bancos por aparcar su dinero en el organismo]". El experto explica cómo según sus cálculos "la mitad del exceso de liquidez que dejan los bancos europeos al BCE va a pasar de cobrarse al 0,50%, a quedarse al 0%. Creemos que casi 600.000 millones de euros, la mitad de toda la reserva, se va a poder acoger a la nueva remuneración del 0%". Esto puede hacer que los bancos descarten inversiones en bonos que hasta ahora podían ser interesantes. "Cuando tu coste del dinero está al -0,25%, frente al -0,50% que se te estaba cobrando hasta ahora, ¿tendrán el mismo incentivo para comprar deuda alemana al -0,50%, o un holandés al -0,40%?", se pregunta Lluva. "Lo normal va a ser que se reduzca esa inversión. Es una cuestión técnica", explica. Además, añade que "es posible que los 20.000 millones cada mes dejasen al mercado un poco frío. Aunque es cierto que anunció que lo va a hacer el tiempo que sea necesario, hay que dividir entre soberano y corporativo".

    Al minoritario no le compensa el riesgo

    Los expertos son reticentes si se les pregunta si las ventas que se han visto en renta fija en septiembre son el inicio del desinfle definitivo de la burbuja de renta fija. "Todavía no espero una corrección importante en las subidas de la renta fija, porque todo el mundo tiene la vista puesta en la llegada de Christine Lagarde, y que con ella lleguen los tipos de interés de referencia en terreno negativo", explica Javier Santacruz, economista investigador. "Con rentabilidades negativas, la única forma de ganar dinero es jugar con las subidas de los precios. Eso es en lo que a día de hoy están los grandes gestores de renta fija y, especialmente, sabiendo que el BCE es el mayor hedge fund de renta fija del mundo. Hasta que no se marquen nuevos precios derivados de las compras en el nuevo programa, de ahí no se va a mover nadie", señala Santacruz, quien, a pesar de esto, destaca que, si uno es un inversor minoritario no es buena idea entrar en deuda: "A un pequeño inversor no se lo recomendaría. Tiene que buscar lo que quede en renta variable con algo de valor. La deuda es un suicidio para ellos. Ahora es un producto sólo para inversores profesionales", señala.

    Juan Fernando Robles, profesor de banca y finanzas, también cree que queda recorrido al alza en los precios de la renta fija, y opina sobre las últimas caídas que "son movimientos que no son representativos de lo que puede ocurrir a largo plazo". Para él, la llegada de Lagarde también puede apoyar más subidas de precio: "El cambio de presidente no va a suponer un cambio en la política monetaria, sino una continuidad, o incluso una profundización", explica Robles.