El reparto de dividendos de la banca está en el punto de mira del Banco de España. La subgobernadora del organismo supervisor, Margarita Delgado, volvió a recriminar ayer al sector financiero el perjuicio que supone para su solvencia la retribución al accionista en efectivo, mensaje que ya es un martilleo constante en el oído de las entidades en los últimos meses. Delgado instó al sector financiero a recuperar el scrip dividend, la retribución al accionista a través de la entrega de nuevas acciones emitidas, en vez de en efectivo. "Esta política permite aunar la necesaria retribución del capital con la generación orgánica del mismo, si bien acarrea inevitablemente una cierta dilución del beneficio por acción, como por otro lado sucede siempre que se realizan ampliaciones de capital", aseguró durante su discurso de apertura del encuentro organizado por KPMG sobre 'Los retos actuales del sector financiero'. Delgado también aprovechó su intervención para comenzar a dejar calar un mensaje entre el sector financiero: una futura activación del colchón anticíclico de capital. "Creo relevante destacar que, a diferencia de España, la mayoría de los países de nuestro entorno ha activado, o ha anunciado la activación, de colchones anticíclicos de capital, lo que puede explicar parcialmente el incremento de sus ratios de solvencia". Este instrumento obliga a la banca a incrementar su capital en un momento expansivo o de sobrecalentamiento de la economía para que, en momentos de recesión, y por tanto, de crecimiento de riesgo por la mayor morosidad, sea liberado para absorber pérdidas. Por otro lado, la número dos del Banco de España apuntó que no todo vale en las fusiones. Delgado aseguró que las integraciones pueden ayudar a incrementar la rentabilidad y la eficiencia de la banca, pero son operaciones complejas de las que, en algunos casos, acarrean problemas de integración durante años. Así, apuntó a que el organismo que representa vigila que estas consolidaciones cree una entidad más solvente.