La caída que arrastra la acción en el año, de más del 16%, le lleva a ofrecer el rendimiento más alto desde finales de 2016En un contexto en el que Europa se juega la vuelta a mínimos del año, ya que los índices son incapaces de superar las resistencias de corto plazo, el sector bancario es la pieza clave. Y es que de éste depende que las señales que reciba el mercado sean alcistas o bajistas. Tal y como recuerda Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, "a corto plazo solamente resta esperar a que el sectorial bancario europeo también pierda soportes clave y únicamente si se forma un potente reversal desde los mismos podríamos favorecer un contraataque alcista con ciertas garantías". En este sentido, los bancos son los más bajistas del Viejo Continente en lo que llevamos de año, con una caída superior al 13 por ciento y Banco Santander se cuela entre los diez más penalizados con un descenso que sobrepasa el 16 por ciento. De momento, está siendo su peor año en bolsa desde 2015. Ahora bien, este tropiezo está permitiendo a la entidad ofrecer una rentabilidad por dividendo cercana al 5 por ciento, algo que no ocurría desde finales de 2016, ya que su acción se encuentra en mínimos de entonces. Es más, hace apenas tres meses el mismo dividendo no superaba un rendimiento del 4 por ciento. Cabe recordar que este año será el último en el que Banco Santander recurra al scrip dividend o pago en acciones en uno de sus dividendos (realiza cuatro al año), con cargo a los beneficios de 2019 la entrega será completamente en efectivo. A este respecto, varios son los factores que están afectando al sector. Por un lado, en su última reunión, el BCE frustró los planes de una subida de tipos próxima, ya que hasta, al menos, después del verano de 2019, el organismo no se plantea subir el precio del dinero, lo que penaliza los márgenes de la banca. Por otro, la situación al otro lado del Atlántico, tal y como alertan desde JP Morgan: "Existe un riesgo importante para Santander en caso de que el crecimiento de Latinoamérica, y especialmente de Brasil, sea inferior al esperado". Eso sí, a pesar de su evolución en el año, el mercado sigue estando positivo con la entidad cántabra. De hecho, es el único banco del Ibex con una recomendación de compra según el consenso de analistas. Además, la perspectiva es que su beneficio siga mejorando, ya que se espera que en 2018 gane cerca de 8.000 millones de euros, un 21 por ciento más que en el ejericico anterior. "Banco Santander sigue mostrando capacidad de crecimiento tanto a nivel nacional como internacional. La diversificación geográfica permite al banco dirigido por Ana Botín mejorar en resultados, ya que ha experimentado mejoras sustanciales en los rendimientos del área de Iberia y del resto del mundo", explican desde GVC Gaesco. Mejoras generalizadas La mejora de rentabilidad por dividendo que ha experimentado Banco Santander no es un caso aislado. Y es que el resto del sector español ofrece los rendimientos más altos en lo que llevamos de año. Es el caso de CaixaBank, con un 5,5 por ciento; Banco Sabadell, con un 5 por ciento; BBVA, con un 4,7 por ciento; Bankia, con un 3,7 por ciento; y Bankinter, con un 3,6 por ciento. En Europa destaca el dividendo de la italiana Intesa Sanpaolo, ya que sus pagos ofrecen este año un interés superior al 7 por ciento.