La política de reducción de la deuda, España y Reino Unido, a examenCon una de sus mejores recomendaciones de los últimos años, pero también con sus títulos mostrando una debilidad que pocos esperaban, Telefónica rendirá cuentas al mercado este jueves al presentar los resultados de 2017. Con los títulos buscando un catalizador que les permita reaccionar, el mercado vigilará cómo evolucionan los resultados por regiones y la política de reducción del apalancamiento. Con la venta del 40 por ciento de Telxius a KKR y los progresos realizados en el último trimestre, el consenso espera que la deuda caiga de los 45.000 millones y que su ratio deuda/ebitda se quede en 2,7 veces. "Estaremos atentos a la posibilidad de venta de activos en Latinoamérica y posibles escenarios para la monetización de O2. La prioridad para Telefónica es recortar deuda y que los inversores valorarían estrategias encaminadas a ello", explican desde Renta 4. Por regiones, las fluctuaciones de las divisas en Latinoamérica han sido un dolor de cabeza durante los últimos meses, provocando ligeros recortes en las estimaciones. El mercado especula con que se realicen desinversiones en negocios no core, con lo que podría levantar 3.000 millones de euros. Los resultados en Brasil siguen funcionando, con el beneficio creciendo el 13 por ciento. En España, la irrupción de Masmovil ha sido un problema. Aunque la firma sigue teniendo un tamaño diminuto en comparación con Telefónica, ha generado una presión competitiva intensa. Sin embargo, las mejores condiciones macro en el país deberían actuar como apoyo para seguir creciendo. En Reino Unido, más allá de los problemas que ha tenido por el veto a la venta de O2, Telefónica se ha encontrado con una dificultad adicional con el retraso en las subastas de espectro. Ahora la ruta se ha despejado después de que la justicia haya desestimado los litigios y el regulador haya dado luz verde a la subasta, una condición imprescindible para poder colocar su filial.