La firma del sector de los semiconductores tiene en Samsung a su principal cliente y en Asia su mayor mercadoDetrás de los teléfonos móviles, los ordenadores portátiles e incluso los automóviles más actuales existe una parte a escala nanométrica que se mantiene oculta, pero permite que todo funcione con la velocidad que se espera hoy día. Los circuitos electrónicos integrados, también conocidos como microchips de silicio, albergan millones de transistores diminutos que unidos por medio de materiales conductores dejan pasar la corriente eléctrica y son la clave para que podamos hacer tanto, y tan rápido. Precisamente a fabricar estos microprocesadores y las máquinas con las que producirlos se ha dedicado Applied Materials durante el último medio siglo. La compañía californiana es el valor destacado esta semana del Eco30, el índice de bolsa mundial elaborado por elEconomista y calculado por Stoxx, por recibir la mejor recomendación de compra de las 30 firmas que componen el índice, según el consenso de mercado que recoge FactSet. La compañía vive un momento histórico en su cuenta de resultados, y eso se refleja en la confianza de los analistas. La previsión de 2017 indica que superará los 3.500 millones de beneficio neto, el mejor de su trayectoria, y sobrepasaría los 2.000 millones del año 2000. Pero en los próximos dos años será aún mejor si se cumplen las expectativas del mercado: aumentará un 35 por ciento y se situará por encima de los 4.700 millones de dólares. Sólo en 2018, se esperan unas ganancias un 20 por ciento superiores a las de 2017, lo que consolidará unos años de beneficio histórico. La región de Asia-Pacífico es su principal mercado. De hecho, casi el 85 por ciento de sus ingresos el pasado ejercicio procedían de allí, en especial de Corea del Sur, Taiwán, China y Japón, según cifras de FactSet. Su cliente más importante es Samsung, que representó el 23 por ciento de su cifra de negocio en 2017. Asimismo, entre sus principales clientes también se encuentran otros miembros del sector como Taiwan Semiconductor Manufacturing, Intel y Micron Technology. Applied Materials fabrica equipamiento que utilizan otros de sus colegas para elaborar sus microchips, lo que le otorga una posición relevante en el mercado. Una de sus especialidades es el aplanamiento químico-mecánico (CMP en sus siglas en inglés), con el que consigue que la superficie de la oblea, como se denomina al chip por su finura, sea lo más liso y homogéneo posible. La firma estadounidense avanza en torno a un punto porcentual en el parqué desde el comienzo del año -en especial tras las caídas generalizadas del sector el pasado viernes- y sus acciones cotizan en la zona de los 51 dólares, un 12 por ciento por encima del sus máximos en pleno auge de las empresas tecnológicas en el año 2000.