Desde los máximos de junio la compañía se deja cerca de un 17% en el parquéJosé Manuel Vargas, el que fuera presidente y consejero delegado de Aena, presentó el martes a mediodía su dimisión por "motivos personales". Al ocurrir esto antes del cierre del mercado europeo, la reacción no se demoró y los títulos de la gestora aeroportuaria se dejaron un 2,3 por ciento en la sesión. Estas pérdidas continuaron el miércoles al inicio de la sesión, llegando a perder hasta 800 millones de capitalización. No obstante, después rebotó con fuerza y, a cierre del mercado de ayer, estas pérdidas se habían mitigado hasta los 220 millones de euros (cerca de un 1 por ciento de su valor bursátil). En este contexto, ha llegado la respuesta de los analistas que siguen a la compañía, que, a pesar de mostrarse divididos ante la noticia en primera instancia, acabaron por corroborar el deterioro de recomendación que ha registrado la firma en los últimos meses. Así, mientras Barclays mantenía su valoración y estimaba que es momento de tomar posiciones, HSBC modificaba su consejo de mantener los títulos en cartera a cerrar la estrategia. Además, emitía un fuerte recorte a su precio objetivo, en concreto, del 23 por ciento hasta situarlo en los 130 euros por acción, es decir, que vaticina una caída adicional de más del 12 por ciento desde los precios actuales. La salida de Vargas es algo que venía fraguándose desde hace tiempo, como aclaró el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, que pidió al ahora expresidente que se mantuviera en el cargo hasta después del verano. Aunque se aludía a "motivos personales", las discrepancias con el devenir de la empresa eran notorias, ya que Vargas defendía la privatización de Aena, algo que fue rechazado por el Gobierno. Además, el que oficialmente dejará el cargo el próximo 15 de octubre era partidario de la adquisición de Abertis y reconoció que "la opción era única porque no hay más empresas de su sector en España con su tamaño", algo que era "viable financieramente" pero también fue rechazado. La incapacidad de hacer crecer a la compañía de la manera que Vargas entendía como adecuada ha provocado un deterioro en su recomendación que la ha llevado a ocupar la antepenúltima posición en La Liga Ibex de elEconomista, que es el ranking que permite detectar qué valores tienen la mejor y la peor recomendación del consenso de mercado, según una combinada de Bloomberg y FactSet. Una posición que contrasta con la que ocupaba hace justo un año. No en vano, la firma se ha deplomado 12 puestos en la lista que elabora este diario. "Las perspectivas de crecimiento de la compañía a medio y largo plazo son bajas", declaran en Goldman, De hecho, desde la firma estadounidense esperan que "el crecimiento del tráfico aéreo se ralentice a medida que remite el reciente impulso que ha tenido el turismo en España por aspectos geopolíticos". Y esta tendencia se ha visto reflejada en el resto de analistas que la siguen. Según el consenso de mercado, se espera que sus ganancias apenas repunten un 9 por ciento en el trienio ante la falta de catalizadores que la impulsen.