Durante los últimos tres meses, el Banco Santander ha sufrido un retroceso en bolsa del entorno del 8%, lo que lo ha dejado retrasado frente a los índices bancarios de la eurozona y también con los comparables de las regiones en las que está establecido e, incluso, con sus propias filiales cotizadas. Según un informe elaborado por Jefferies, la entidad presidida por Ana Botín se ha dejado 10 puntos porcentuales con respecto a sus comparables en sus geografías y sus filiales cotizadas –ver gráfico– desde finales de octubre.Para los expertos de la casa de análisis, gran parte de esta brecha se produjo a raíz del guidance sobre los niveles de capital que ofreció la entidad tras la presentación de resultados del tercer trimestre, lo que es "un problema básicamente del grupo, por lo que desaparece del comportamiento operativo de cada geografía". Así, creen que este gap podría persistir, al considerar que "la débil posición de capital podría seguir pesando sobre el sentimiento del inversor". En Jefferies aconsejan deshacerse de los títulos del banco y le otorgan un precio objetivo de 3,3 euros, un 9% por debajo de su cotización actual. Sin embargo, ésta no es ni mucho menos la opinión mayoritaria del consenso: tiene la mejor recomendación entre los bancos del Ibex –un mantener cercano a la compra– y ven sus títulos en los 4,44 euros, lo que implica un potencial del 22%. Una de las posibilidades con las que cuenta Santander para remontar es que la presión regulatoria afloje en Europa y la primera señal llegó a finales del pasado año, cuando Unicredit desveló que para el Pilar 2 de capital utilizaría AT1 y T2 y no solo el de máxima calidad CET 1, como se exigía a los bancos hasta el momento. "Después de la presentación de la entidad, concluimos que ahora los requerimientos de Basilea 4 probablemente sean manejables para el sector y que habrá menos riesgo para los dividendos", señalan en JP Morgan.A 7,4 veces su beneficioCon el débil comportamiento registrado por la acción, los títulos del Santander cotizan a 7,4 veces sus ganancias de este ejercicio, lo que supone un descuento del 20% con respecto al nivel en el que lo hace el sectorial europeo. Mientras, por valor contable ofrece una rebaja del 38%. "En nuestra opinión, las acciones del Santander están descontando en exceso que el banco tenga unos niveles bajos de capital. La generación orgánica y las medidas anunciadas por la directiva deberían permitir absorber cualquier viento en contra regulatorio y mantenerse por encima del objetivo marcado por la compañía", explican los analistas de RBC Capital Markets. En esta misma línea, en Barclays apuntan que "el capital está mejorando y está en buena forma, las ganancias reflejarán los recortes de costes en Europa a partir de 2020 y la rentabilidad seguirá siendo sólida en Brasil y México".Uno de los posibles catalizadores para la acción será la presentación de los resultados de 2019 el 29 de enero. Los expertos estiman que acabará el ejercicio en torno a los 6.500 millones de beneficio, un 17% por debajo del resultado de 2018. Mientras, para este año los analistas prevén que las ganancias del banco ascenderán por encima de los 8.100 millones, un 26% más de lo previsto para el cierre del pasado año.