La lucha por el operador de la bolsa española no será fácil. Después de la oferta lanzada por SIX, Javier Hernani, consejero delegado de BME, adelantó ayer que si hay nuevas propuestas deberían superar el precio, como marca la ley, pero también el plan de negocio que ha presentado el grupo suizo.Hernani explicó, tras preguntas de la prensa en el marco del foro Latibex, que "evidentemente" si hay una firma interesada "tendrá que mejorar el precio y los compromisos de estabilidad, integridad y solvencia del mercado español".De momento, tanto BME como Euronext han reconocido conversaciones, pero no hay nada más allá. En cualquier caso, la oferta lanzada por SIX ya es bastante competitiva y, de hecho, si Euronext quisiera batirla debería hacer un esfuerzo importante. De realizarlo a través de una ampliación de capital, por ejemplo, tendría que elevarlo 5 veces más que sus rivales. "Lo que venga a partir de ahora lo miraremos, pero no me corresponde decir a mí si es difícil mejorar la oferta de SIX o no", ha dicho Hernani. Aunque en realidad aquí lo importante no sería tanto el precio como el resto de condiciones. Hernani quiso destacar que lo importante es que la infraestructura, los em-pleos, el software y el futuro en general de BME se vea potenciado y reforzado con las ofertas que lleguen. Y es que la ya recibida "potencia España, potencia los servicios, los negocios que tenemos en BME", dijo. "Nos parece una oferta interesante. Por eso el consejo ha acogido favorablemente tanto el plan industrial como el precio, que captura razonablemente el valor de la compañía", recordó.Ya lo adelantó el gestor español el lunes en un comunicado. El "Consejo de Administración ha valorado favorablemente los compromisos que SIX ha adquirido frente a BME". Entre otras cosas, el grupo suizo garantiza que "el negocio de BME se mantendrá con un grado suficiente de independencia"; que conservará las marcas actuales y las líneas de negocio, sedes, oficinas y estrategias en España al menos durante cuatro años; o que adoptarán medidas para asegurar que las funciones que son intrínsecas a las filiales reguladas de BME (así como el personal y las tecnologías necesarias para su funcionamiento) se mantendrán en España. La duda, por tanto, es si Euronext sería capaz de igualar estas condiciones.El consejero delegado de BME confirmó "que esto va a ser una maratón, va a durar muchos meses, ya veremos quién se acerca y quién no". Y es que además del largo proceso de una opa, aquí entra en juego la autorización que debe dar el Gobierno, tras un informe previo de la CNMV. Pero si todo va bien, el gestor español formará parte de la consolidación que se lleva produciendo durante más de una década.